Rhaenyra miraba el entrenamiento de sus hijos,junto a sus hijastros, el pequeño Aegon de ahora un año, estaba entre sus brazos. Ya era parte de la rutina de la heredera ver como sus hijos entrenaban, mientras ella y los más pequeños comían algunos dulces y pasteles, y hablaban de cualquier cosa. A Regnar le alegraba que sus hijos mas chicos aceptaran a su nueva esposa, y se sintieran cómodos con ella. El perder a su madre siendo tan jóvenes, podía ser duro para ellos, sobre todo Theon que ya contaba con 4 años.
La sorpresa que ambas mayores se llevaron, fue cuando el pequeño Kraken, llamo mamá a la Targaryen, sorprendiendo a los Greyjoy, y provocando el llanto del dragón. Desde ese día no dejo de llamarla asi.
Cuando termino el entrenamiento, toco las clases de los niños, asi que despues de darse un baño, se fueron a la biblioteca, donde Gerardys los esperaba. Regnar se quedo en su barco, arreglando algunas cosas, pues tenia pensado llevar a toda la familia a navegar.
Rhaenyra deja a sus hijos bajo el cuidado de Elinda, para despues salir a buscar a su esposa. Al llegar al Holandés Errante, encuentra a Regnar sentada sobre un banquillo cosiendo unas redes, se encamina hacia ella y se sienta a su lado.
- ¿Que sucede pequeño dragón? - Pregunta la Greyjoy al sentir a cabeza de la Targaryen sobre su brazo.
- Nada, solo quería verte. - Le responde Rhaenyra alzando sus hombros, para despues acaricias el brazo de la mayor.
- ¿Estas preñada otra vez, o ya te enamoraste de mi? - Se burla la mayor, sin dejar de hacer su trabajo.
- No estoy embarazada. - Susurra Rhaenyra. - ¿Vas a salir a pescar? - Le pregunta evitando contestar o demas, Regnar se ríe besando su cabeza.
- No. Pero me gusta tener todo preparado. Quiero que naveguemos todos juntos. Pasar unos días en el mar. - Le responde.
- Me gusta esa idea. Descansar de las obligaciones, y despejar la mente. - Acepta Rhaenyra.
- Yo siempre tengo buenas ideas. - Se jacta la Greyjoy.
- Si, como tu idea de que Leanor nos abandone. Fue muy buena, ahora soy tu esposa, y te di un hijo. - Le reprocha la Targaryen.
- No buscaba casarme contigo. Lo que menos quería era tener otra mujer. ¿Todavía estas enojada por eso?
- Si. Siempre voy a estar enojada por eso.
- Que rencorosa, pequeño dragón. - Se burla la mayor, Rhaenyra solo niega con la cabeza.
Estuvieron un rato en silencio, Regnar continuaba cosiendo su red, mientras Rhaenyra la observaba trabajar, con su cabeza apoyada sobre el brazo de la mayor, abrazándose a el.
- ¿Por que no vas al castillo? Allá estarás más cómoda y caliente. - Siguiere Regnar al sentirla temblar.
- Estoy cómoda acá. ¿O vos queres que me vaya? - Le responde la peliblanca.
- No me molesta tu presencia. Pero yo tardare preparando todo para zarpar mañana. Te poder aburrir, y aquí esta mas fresco. A los dragones no les gusta el frió.
- Puedo ayudarte.
- ¿Que me vas a pedir? - Rhaenyra la mira confundida. - No me mires asi pequeño dragón. No te olvides que ya tuve dos esposas, y reconozco sus técnicas. Si estas asi es por algo, o estas embarazada, o queres algo, o hiciste algo. Vamos ¿Cual de las tres es?
- No hice nada, tampoco estoy embarazada, todavía. - Regnar se ríe. - No quiero nada, de verdad. - Le asegura Rhaenyra.
- Si vos decís pequeña. Los niños ¿Que hacen?
