Reborn At Boot Camp: General, Don't Mess Around! 2

Capítulo 222: ¡Qué bofetada tan fuerte en la cara! (Parte II)

Zhang Bin era el supervisor de Educación Física, por lo que estaba cerca de todos los profesores de la asignatura.

Él inmediatamente reconoció lo que dijo el director y salió corriendo del aula.

—¿Por no voy primero a tu oficina? —El secretario vio esto y dijo en voz baja. —Esta señora tiene un mal carácter. Necesitarás algo de tiempo.

El director Chen Sonrió y dijo con calma. —No hay necesidad de evadir esto. Simplemente finge que estás escuchando una lección.

Hace poco hizo un berrinche. Esta señora no sólo tenía mal carácter, ¡necesitaba una buena paliza!

¿Pensaba que los profesores y los estudiantes le tendrían miedo solo porque se enfadaba? Bueno, yo, Chen Dongfeng, ¡no tengo miedo!

Gao Yiyang también estaba involucrado en este asunto. Así que el ordenó a otro estudiante que se sentaba a su lado. —Ve a la Clase Uno de Noveno Grado y pídele a Gao Yiyang que venga. Gao Yiyang si su maestro pregunta, dile que lo estoy buscando. Oh, pídele que vaya a mi oficina y traiga la cinta de video.

Después de arreglar todo, le hizo un guiño a Ye Jian para decirle que todo estaba bajo control. Luego, invitó al secretario Wu a la parte de atrás del aula y le consiguió un asiento. Realmente parecía como si estuviera escuchando una lección.

—El director Chen le pidió a Fudong que saliera. Supongo que llamará a Gao Yiyang para que baje. —An Jiaxin apretó los dientes. Su rostro estaba verde de ira—. El director Chen tiene grandes esperanzas en ti. Definitivamente le dará una lección.

Zhou Liao, —a quien normalmente no le importaba lo que sucedía en clase—, le susurró a Ye Jian. —De tal palo, tal astilla. Ye Jian, Es un milagro que sigas con vida ahora.

—Ja, espera. El espectáculo apenas comienza. —Zhang Na sonrió sarcásticamente. Miró a la nerviosa Ye Ying y comenzó a sonreír más alegremente. Nunca le gustó ella.

Ye Jian sabía que el director Chen no dejaría que las cosas salieran tan fácilmente esta vez, por lo que se sonrió gentilmente.

No esperaba que Sun Dongqing fuera tan engreída. ¿Cómo pudo Ye Zhifan soportarla?

Cuando escuchó la discusiones y Asus amigos hablar a su favor, respondió con indiferencia. —En comparación con lo que pasó antes, esto no es nada. Todos ustedes pueden aprender algunas cosas de ella.

—Voy a vomitar. ¿Qué aprenderíamos de ella? ¿Me veo como si me quisiera suicidar?

—Deja de intentar irritarnos. Prefiero aprender del padre de Liao Jian que de ella.

Ye Jian permaneció tranquila y sonrió con dulzura. —Todos ustedes pueden aprender a ser alguien que no sea irritante. Aprendan a ser alguien agradable... Eso es lo que ella nos puede enseñar.

An Jiaxin se giró y miró rápidamente a Ye Jian. Suspiró. —Ye Jian, tienes una mentalidad fuerte. ¡Te respeto! Me puse muy furiosa cuando escuché lo que dijo, pero tú permaneciste muy tranquila.

—Incluso nos recordaste que no nos convirtiéramos en alguien a quien odiáramos. Compañera de clase Ye Jian, si me convierto en médico cuando sea adulto, ¡la primera persona a la que me gustaría examinar serás tú! ¿Tu cerebro es diferente al nuestro?

Cuanto más le daba, igual, más enfadada estaba Sun Dongqing. De ese modo, ella sería la que saldría perdiendo.

Ye Jian tenía clara la situación. Vio a Gao Yiyang entrar al aula con una cinta de vídeo. Su sonrisa se hizo más profunda.

Tsk, tsk, tsk. No importa lo inteligente que fuera Ye Ying, tenía una madre engreída. Qué lástima.