Reborn At Boot Camp: General, Don't Mess Around! 2

Capítulo 292: Él la observó mientras crecía

Para igualar la velocidad de Ye Jian, Xia Jinyuan disminuyó un poco la velocidad. Una figura alargada y otra delgada aparecieron detrás de los dos mercenarios simultáneamente.

Ella tenía intenciones asesinas en sus ojos. Si él estaba persiguiendo a estas personas, debían haber cometido algo imperdonable. Además, mataron a un pastor.

Elviento aullaba parecía como si estuviera creando la atmósfera para la batallaque pronto se desataría.

Cada combate era una situación de vida o muerte. Sin importar cuál fuera la situación, era importante mantener la calma. En combate cuerpo a cuerpo, la otra parte no tendría tiempo de disparar sus armas. Sin embargo, tú tampoco tendrías tiempo de disparar. Por lo tanto, mantener la compostura era esencial.

—¡Maldita sea, es un soldado! —— uno de los mercenarios. Maldijo en un idioma que ella no conocía. Levantó el puño y apuntó a Ye Jian. Pronto descubrió que la persona que luchaba con él era una niña. El hombre se rió a carcajadas.

Subestimar al oponente era letal en el campo de batalla. Sin embargo, cuando el mercenario la vio ya la menospreciaba.

Esto fue algo bueno para Ye Jian.

Ella también fingió ser más débil. Ye Jian siempre recordó usar bien su ventaja.

La diferencia de habilidad era evidente, pero no era porque ella fuera más débil que su oponente.

Desde el comienzo de la pelea, se pudo notar que su oponente nunca había pasado por ningún entrenamiento profesional.

Además, si los enviaban a enterrar a los mastines tibetanos, demostraba su posición en el equipo.

Había una disparidad en la posición de los mercenarios.

La daga militar que tenía en la mano cortaba el viento. Sintió que la daga se clavaba en la piel de alguien. Así de cruel era una pelea de vida o muerte. ¡O mueres o sales con vida!

Xia Jinyuan se movió ágil y rápidamente. Después de algunos cortes, su daga militar se clavó profundamente en la pierna de su oponente. Su oponente gritó de dolor y usó su codo para golpear la cabeza de él.

Este mercenario había recibido entrenamiento profesional. Xia Jinyuan se dio cuenta de ello cuando observaba los dos mercenarios a través de sus gafas de visión nocturna. Eligió este mercenario a propósito y dejó al más débil a Ye Jian.

Hoy, cuando recibió un golpe en la cabeza, él se quedó entumecido por un momento. Reaccionó instintivamente y golpeó la nariz de su oponente con el puño.

Cuando alguien recibía un golpe en la nariz, cerraba naturalmente los ojos y su mente también quedaba en blanco durante unos segundos.

Xia Jinyuan aprovechó esos pocos segundos y agarró su daga militar que estaba en la pierna de su oponente. A pesar de haber sido golpeado en la cabeza como soldado, —que había pasado por un entrenamiento brutal—, todavía actuó sin miedo.

Sacó la daga y la sangre caliente brotó por todas partes y manchó sus guantes.

El mercenario gritó de dolor. Levantó su pierna sana y pateó el pecho de Xia Jinyuan.

Desafortunadamente, su otra pierna herida lo frenó. No pudo contraatacar.

Él no retrocedió. Utilizo su codo derecho y recibió el impacto de la patada. Sabía que su misión era matar a ese mercenario que estaba haciendo su último esfuerzo por escapar.

Su rostro se puso horrible por el dolor en su brazo. Al segundo siguiente, Xia Jinyuan saltó y clavó su daga en la garganta de su oponente.

Bajo el guante, las venas de su mano sobresalían. Estaba usando una fuerza descomunal mientras hacía girar la daga.

Este fue el golpe final. El golpe que mataría a su oponente.