CAPITULO 13

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SARA

Estaba bailando con Alex cuando de repente unos chicos se acercaron a nosotros. Me dijeron algo que me hizo separarme de Alex e ir con ellos. Sentí una extraña mezcla de curiosidad y nerviosismo mientras los seguía.

No tenía idea de lo que me esperaba.

Me llevaron a una habitación vacía y uno de ellos abrió la puerta. Antes de que pudiera reaccionar, me empujaron suavemente hacia adentro y cerraron la puerta detrás de mí. En ese momento, sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué me habían encerrado aquí? – Demonios porque me pasan estas cosas, solo me decía a mi misma pensando en esta situación.

"Lo siento, nena. Es solo una broma", dijo uno de ellos antes de asegurarse de que no pudiera salir. Mi corazón latía rápidamente mientras intentaba similar lo que acababa de suceder.

La oscuridad comenzó a envolver la habitación y sentí un nudo en el estómago. Sabía que tenía que mantener la calma y encontrar una manera de salir de allí. Comencé a explorar la habitación en busca de alguna pista o herramienta que pudiera utilizar para liberarme.

De repente, escuche un ruido proveniente de la puerta. Mi corazón se aceleró aún más.

¿Eran los chicos que me encerraron regresando para liberarme?

Con esperanza, me acerqué a la puerta y la empujé, pero seguía cerrada con llave. El ruido se hizo más fuerte y me di cuenta de que alguien más estaba allí.

Con cautela, me acerqué a la puerta y escuché voces susurrantes al otro lado. Parecía que los chicos no estaban solos. ¿Quiénes eran esas personas y qué querían de mí? Escuchaba como hablaban con una mujer y de como le dejaron el camino libre, Dios no sabia de que estaban hablando, acaso se confundieron de persona, Maldita sea porque vine aquí, pero de pronto escuche que mencionan a Alex y me preocupe, no sabían que tramaban y porque me separaron de él, sentí una chispa de determinación. No iba a dejarme vencer tan fácilmente.

Decidida a encontrar una salida, mi mente comenzó a maquinar un plan. Recordé que uno de los chicos parecía más receptivo que los demás. Con un poco de astucia, pensé que tal vez podría seducirlo y convencerlo de que me dejara salir.

Me acerqué a él con una sonrisa coqueta, jugando con un mechón de mi cabello.

"Hola, guapo", susurré al oído, tratando de captar su atención. "¿No crees que esto es un poco aburrido? Podríamos divertirnos mucho más si me dejaras salir".

Él me miró con una mezcla de sorpresa y diversión.

"Oh, así que quieres salir, ¿eh?", respondió con una sonrisa pícara. "Puede que estés encerrada, pero eso no significa que no podamos pasar un buen rato aquí dentro".

Mi intento de seducción parecía estar funcionando, pero a medida que hablaba, noté que su expresión se volvía más fría y distante.

"No te preocupes, nena. No vas a salir tan fácilmente", dijo con una sonrisa burlona.

Me di cuenta de que mi intento de seducción había fracasado. Sentí una mezcla de frustración y desesperación. ¿Cómo podía haber sido tan ingenua al pensar que podría manipularlo?, joder esto no es lo mío.

Finalmente, después de mucho esfuerzo, logré encontrar una salida. Sentí un alivio inmenso al ver la luz del exterior y respirar el aire fresco. Mi corazón latía con fuerza mientras corría en busca de Alex.

Mientras me adentraba en la fiesta, buscando a Alex entre la multitud, mi corazón se hundió al verlo en compañía de una chica. Sentí una mezcla de alivio y decepción al darme cuenta de que él no estaba atrapado como yo lo había estado.

La Madre de mi Mejor Amigo. » ACTUALIZADA «Donde viven las historias. Descúbrelo ahora