La Madre de mi Mejor Amigo. » ACTUALIZADA «

CAPITULO 7

"Ven, sube", dice Deniss con una sonrisa mientras baja el cristal del auto. Al entrar, me acomodé en el asiento del copiloto, mientras Matt estaba en la parte trasera escuchando música. Desde el frente, podía sentir la mirada de Deniss de vez en cuando. En un semáforo, ella afirmó que tenía calor, quitándose la chaqueta y dejando al descubierto sus piernas bajo un pequeño vestido. Mientras esperábamos, Deniss comenzó a jugar con sus prendas íntimas y deslizar su mano por su pierna, desatando una oleada de deseos en mí. A pesar de la tensión palpable, me mantuve en silencio.Finalmente, a unas cuantas cuadras de mi casa, Deniss rompió el incómodo silencio. "Matt... ¡MATT!", lo llamó, solicitando una gaseosa. Mientras Matt se ocupaba de su petición, Deniss aprovechó la oportunidad para acercarse y darme un beso apasionado.

"¿Hace rato que querías hacer esto?", preguntó entre susurros, a lo que respondí con un susurro igualmente ardiente. La tensión sexual entre nosotros era palpable, estaba caliente como el infierno, me mordía el labio y yo le agarraba las nargas mientras hacía a un lado sus bragas y acariciaba con mis dedos sus feminidad, pero fue interrumpida por la llegada de Matt.

Al llegar a mi destino, salí del auto y subí rápidamente a mi casa, mientras mi mente se inundaba con los recuerdos de ese momento. Confundido y emocionado, me pregunté qué estaba pasando realmente.

Al día siguiente...

Sara se encontraba en el instituto, apoyando al equipo de fútbol junto a su amiga. La emoción en el aire era palpable mientras los jugadores salían al campo. Entre ellos, Alex capturó su atención al guiñarle un ojo, lo que hizo que su corazón latiera con fuerza. El juego avanzaba, con el equipo de Matt y Alex dominando, hasta que un momento tenso detuvo el partido. Alex, rodeado por jugadores contrarios, fue llevado en camilla fuera del campo, despertando la preocupación de Sara, quien lo siguió de cerca.

Cuando finalmente abrí los ojos , Vi el rostro de Sara la vi preocupada sintió un alivio abrumador al verme despierto, "¿Qué haces aquí?", pregunté confundido.

" tienes una novia buena, se quedó contigo hasta que te levantaste" menciona la enfermera, Sara a escuchar esto  lo hizo sentirse incómoda. "Estás bien?", dijo nerviosa Sara, sintiendo que era hora de partir, pero la mirada agradecida de Alex la hizo quedarse un poco más, aunque su corazón latía con fuerza.

ALEX

Espera!! Exclamé mientras ella salía. "¡No te vayas!" Ella me miró frunciendo el ceño y asintió con la cabeza, sentándose frente a mí. La enfermera ya había salido, pero aun así, ninguno de nosotros decía nada hasta que decidí romper el silencio.

"¿Por qué te quedaste conmigo?" pregunté.

"Solo me preocupé por ti", respondió encogiéndose de hombros.

"Eso es lindo. Muchas gracias."

"De nada. ¿Y cómo estás?"

"Estoy bien, gracias."

Me senté en la camilla y la escudriñé. Nuestras miradas se encontraron por unos minutos que para mí fueron infinitos. No podía dejar de observarla, lo que hizo que se sonrojara. Le susurré que se sentara a mi lado, y ella lo hizo. Cuando estuvo justo a mi lado, procedí a acercarme a ella, hasta estar tan cerca de su rostro que nuestras respiraciones se cruzaban y se interrumpían mutuamente. No sabía qué pasaba, pero en ese momento solo pensaba en tener sus labios junto a los míos.

El abrir de la puerta nos interrumpió, y ahí fue cuando mi amigo y su madre me salvaron de hacer una estupidez. Ella se separó de mí sobreexcitada y se despidió de todos, depositando un beso en mi mejilla.

"Vamos, aquí huele a hospital", dijo Matt. "¿A qué se supone que debe oler? ¿A restaurante?" Pregunté sarcásticamente, y todos rieron.

Llegamos a casa de Matt en menos de 10 minutos y procedimos a entrar. Cuando entramos, Matt se despidió con la excusa de que iba a salir con su novia.

"¿Novia?" Dijo Deniss emocionada.

"Wow, mi amigo al fin consiguió novia. Ya estaba pensando que querías un novio", bromeé, y todos rieron con mi comentario.

Ahí fue cuando mi amigo se marchó, dejándome solo con su madre. Prendí la televisión y puse un partido de fútbol. El Real Madrid anotó y solté un grito de emoción, lo que hizo que Deniss saliera corriendo y preguntara.

"¿Qué pasa?"

"No ha pasado nada", dije sin mirar, concentrado viendo el partido. Cuando ella tomó el control y apagó la televisión, me di la vuelta y me encontré con sus hermosas piernas. "Largas piernas", pensé, continuando subiendo hasta encontrarme con unos bóxers llamativos. Miré más adelante y me encontré con una camiseta deportiva. Su pelo húmedo llegaba hasta los senos, lo que hacía que se viera aún más atractiva. Sus labios carnosos hacían que el deseo de besarla aumentara. Ella me miró, observando cada uno de mis movimientos, luego se sentó a mi lado. El roce de su cuerpo semi desnudo me hizo estremecer. Ella me miró y se acercó a mí, lo que hizo que tragara saliva por lo intenso de la situación.

Ella preguntó en tono sugerente y a la vez tierno: "¿Quieres que continúe o me detengo?" y sonrió maliciosamente lo que hace que me excite aún más, ya no soportaba la presión el deseó era ¡Malditamente Grande! Y mi erección ya comenzaba a crecer.

Esta vez rozó mis labios lo que hacia que me volviera loco, pensó que se iba a salir con la suya pero esta vez no aguante, la tomé por la nuca y la bese apasionadamente y ella respondió de una manera increíble, no tarde mucho en sentarla sobre mi mientras ella seguía besándome.
Yo acariciaba sus piernas descubierta hasta llegar a su trasero.

Ella me mira y sonríe, la tome por el cuello y depositaba pequeños besos húmedos en él mientas la tomaba por su cabello húmedo, su respiración se agitaba lo que hacia que me excitara, dado unos minutos ella me detiene y se me acerca ami depositando un gran besó al cual respondí.

Nos detuvimos un minutos y aún con la respiración forzosa susurró a mi oído.
- Besas bien Niñito travieso
- Niñito?. Ella vera ahora" eso pienso antes de levantar su camiseta.

Me detuve a observar sus pechos eran perfectamente hermosos y mi erección crecía aun más y más en mi pantalón, la miro y sonrió a decir. " No esta nada mal"
"Lo se cariño" respondió.

Tomé mi dedo pulgar para humectarlo en mi boca y luego procedo a dar pequeño movimiento circulare en su pezón, siento que con cada roce, cada movimiento se endurecían mas y en muestra de que su excitación crecía al igual que mi erección.

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