EL INVESTIGADOR |KOOKMIN|

CAPITULO 7

Permanece en el interior. No más deambular por la ciudad jugando al detective." No lo miró, solo miraba al frente. "¿Tu apartamento tiene alarma?"

"Sí." susurró.

“Entra, asegúrate de que tus puertas estén cerradas y tu alarma esté encendida. Namjoon o alguien más de Jeon Security se pondrá en contacto contigo por el tipo que intentó agarrarte. Te avisarán cuando sea seguro salir."

Claramente ese no iba a ser él. Jimin sintió como una roca se había asentado en su pecho.

"Jungkook..."

"Entra, Jimin." El vaciló. Golpeó el volante con la palma de la mano. "¡Vete!"

Jimin salió volando del auto y corrió hacia su edificio de apartamentos. Esto era lo que quería, protegerse de Jungkook. Entonces, ¿por qué diablos estaba llorando?

Jimin se secó las lágrimas de sus mejillas y se dirigió a su apartamento

Se estrelló contra la oficina de Jeon Security y se dirigió a su oficina. Jungkook estaba cabreado como el infierno con Jimin. Durante meses lo había deseado, pensaba que era inteligente, sexy, dulce.

Todo ese tiempo, el había pensado que era un idiota. Sabía que la gente hablaba de él. Demonios, la mitad de lo que decían era pura invención. Y la otra mitad... él se dejó caer en su silla. Bueno, no iba a disculparse por ser un hombre soltero con un deseo sexual saludable.

Se conectó a su computadora portátil. Tenía trabajo que hacer. Lo que sea que hubiera entre él y Jimin no afectaba su investigación. Hizo algunas búsquedas del almacén, su temperamento se calmó después de un tiempo. Hmm, era propiedad de una serie de empresas fantasma. Necesitaría a Ace Oliveira, el gurú tecnológico de Jeon Security, para echar un vistazo. Mierda, también le pediría a Ace que se conectara al sistema de alarma de Jimin y vigilara su hogar.

"Hola." Jungkook miró a Namjoon.

"Hola."

"¿Algo nuevo?" preguntó su hermano.

“Recibí una pista de un informante. Comprobé el almacén. Está siendo usado para almacenar artículos robados, pero no la pintura."

"¿Cómo está Jimin?"

"Bien." Mierda.

Ante su tono entrecortado, vio que los ojos de Namjoon se estrechaban. Su hermano era más allá de lo perceptivo.

En las misiones, Namjoon casi podía sentir las cosas antes de que sucedieran. Fue espeluznante.

"¿Problemas?" preguntó Namjoon.
"No. Lo dejé en su casa y le dije que activara la alarma y se quedara ahí hasta que supiera de alguien." Namjoon se limitó a mirarlo. Jungkook suspiró. "Nosotros discutimos. Digamos que pueden dejar de burlarse de mí golpeando con él. He terminado."

"Jungkook..."

"Él cree que soy un jugador, Namjoon. No tengo tiempo para personas superficiales que escuchan mierda y no pueden molestarse en conocerme."

Namjoon guardó silencio por un momento. "¿Sabes sobre Busan?"

Jungkook se puso rígido. "Sé que tuvo un mal ex que lo golpeó."

“Mmm.”

“Suficiente con la mierda críptica, Namjoon.”

Su hermano solo arqueó una ceja oscura. "El secuestrador potencial de Jimin está en el espacio de espera, y todavía no está hablando. Tengo una reunión con Binary Tech."

Ese era uno de los grandes clientes corporativos de Jeon Security;  suministraba todos los sistemas de seguridad, ciberseguridad y, cuando era necesario, guardaespaldas para los ejecutivos de Binary Tech. Una vez que Namjoon se fue, Jungkook trató de concentrarse. Seguía recordando el sabor de Jimin, la sensación de él. Mierda. Su teléfono sonó y lo sacó.