EL INVESTIGADOR |KOOKMIN|

CAPITULO 21

Las palabras crudas hicieron que Jimin se sobresaltara. Maravilloso, Jungkook acababa de decirle al mundo que estaban teniendo sexo. Mucho de eso. Taemin frunció el ceño, la furia ardía en sus ojos. Jungkook giró, tirando del brazo de Taemin por detrás de su espalda.

"Vámonos. No dudes en causar problemas y hacer que te golpee." Jungkook miró a Jimin. "Te veré en casa, ángel. Quédate con Saxon." Jimin asintió. Lisa deslizó un brazo alrededor de él.

"Vamos. Cámbiate y compraremos el traje." Jimin respiró hondo.

"Es un traje asesino," dijo Saxon. "Soy partidario del verde." Su mirada se desvió hacia la camisa verde de Lisa.

"Shoo." Lisa chasqueó los dedos. "No te necesitamos dando vueltas, y Jimin necesita cambiarse."

Deslizándose hacia el vestuario, Jimin se volvió a poner la ropa. Ellos pagaron por el traje y se despidió de Lisa. Su amiga y Saxon intercambiaron algunas miradas, luego Jimin se dirigió con Saxon a su SUV. Fue un viaje tranquilo de regreso a la casa de Jungkook. Él estaba preocupado por él.

"Jungkook lo mantendrá bajo control," dijo Saxon. "El hombre es el rey del control." No estaba tan controlado cuando estaban juntos en la cama. Jimin se humedeció los labios.

“Solo quiero que esto termine de una vez. Finalmente pude encaminar mi vida, un trabajo que amo..."

"Jungkook te ayudará a llegar allí."

"Después de esto, Jungkook y yo también terminaremos." Saxon se rió. Tenía una profunda y sexy. "¿Qué es tan gracioso?" exigió Jimin.

"Jungkook no te dejará ir."

"Perderá interés." El miró por la ventana. "Él seguirá adelante." El  encorvó sus hombros.

"Hablamos mucho sobre misiones." Miró y vio que el hermoso rostro de Saxon se había endurecido. “Algunas misiones pueden llevarte al límite, más más allá de tus límites. Una vez, me dispararon mal." Jimin jadeó no lo sabía. Se preguntó si Lisa lo sabría.

“Estábamos lejos de recibir ayuda. Conseguimos un punto de evacuación, pero estaba a diez millas de distancia. Yo apenas podía caminar, y teníamos un montón de fantasmas entre nosotros y el helicóptero." Jimin juntó las manos. “Jungkook me cargó. Me llevó cada paso, mientras Namjoon y los demás en nuestro equipo proporcionaron cobertura. Me habló todo el tiempo para mantenerme consciente. Dijo que esperaba que todo lo que hiciera al servicio de su país le valiera algo dulce. Dijo que cuando encontrara al hombre adecuado, quemaría el mundo para abrazarlo y mantenerlo a salvo y feliz." Dios. Una quemadura comenzó dentro del pecho de Jimin.

"También dijo que estaba feliz de tener un montón de diversión hasta que lo encontrara." Saxon miró hacia arriba. "Es uno de los mejores hombres que conozco, Jimin."

Él solo miró. Tantas emociones retorciéndose dentro de él. Entonces su teléfono sonó y él parpadeó. Miró la pantalla. Era Jungkook.

"Hola," dijo.

“Ángel, solo quería decirte que tengo a tu ex en la sala de espera. No se derramó sangre." Sus dedos apretaron el teléfono.

"Bueno. Bien."

"¿Estás bien?" preguntó.

"Sí, Jungkookie." Hubo una larga pausa.

"Jungkookie. Me gusta eso. Te veo pronto."

“Jungkook… Gracias. Por todo."

"Nunca tienes que agradecerme, ángel."

Jimin se miró en el espejo. Su maquillaje era perfecto y el traje verde oscuro era precioso. Su cabello, de estilo coreano y color rubio, estaba cortado prolijamente y dividido en dos partes, cayendo de manera ordenada a ambos lados de su rostro. Parecía un millón de dólares. Solo deseaba llevarlo puesto en una noche de fiesta con Jungkook, en lugar de en la fiesta de algún criminal.