By Nhaya
- S-ueltame!-...dije con la voz entrecortada.
Era imposible no sentir dolor, y mi vista se mantenía borrosa, sabía que el que estaba frente a mi era Damián.
- Has despertando dormilona-...dijo con arrogancia y burla.
Se acercó a mi lentamente...
Intente moverme, pero era en vano todo mi cuerpo dolía y no podía moverme mucho. Mis costillas dolían demasiado causando que mi respiración falsee.
Se acercó más a mí.
- ¡¡No te acerques!!-...grité con dolor.
Él sonrió y me ignoró, se colocó de rodillas y comenzó a acariciar mi cuerpo lastimado, eso me causaba dolor y asco.
Recorrió todo mi cuerpo con su mano asquerosa hasta llegar a mi zona íntima. Sentí un escalofrío en ese instante y las arcadas comenzaron a surgir.
No podía evitar derramar lágrimas mientras apretaba mis ojos fuertemente.
En ese momento el estruendo de una pistola me hizo sobre saltar haciendo que el se separara de mi. Él me tomó del brazo y arrastró hasta la puerta.
El dolor era tan insoportable que no podía moverme, mi cuerpo temblaba solo.
Abrió la puerta y junto a el me arrastró hasta fuera, a lo lejos se escuchaba un gran alboroto. Eran ellos, Bill y Tom...
Intente moverme un poco pero mi cuerpo me lo impedía. Damián me arrastró hasta una habitación.
Había demasiada sangre que me mareé y mis vista se nubló aún más.
Me aventó con fuerza y se colocó a un lado.
- Aquí te quedas, quieta!-...dijo mientras caminaba fuera.
En aquel piso podía ver cómo había órganos entre la sangre, me aterrorice sin poder impedir las lágrimas.
Intente levantarme como pude, mientras mi cuerpo temblaba y dolía.
Me sostuve de una pequeña mesa, y intenté caminar fuera de la habitación resbalando con la sangre en el piso mientras mis piernas falseaban.
Llegué hasta la puerta y lentamente la abrí, no había nadie en aquel pasillo. A lo lejos se seguía escuchando aquel alboroto mientras también se escucha la risa de Damián.
Miré detalladamente aquel lugar buscando alguna salida, caminé lentamente fuera de la habitación por el pasillo, lentamente y sin hacer ruido intentando buscar una salida. Comencé a sentir como algo goteaba del costado de mi abdomen. Lo toqué fuertemente intentando para el sangrado pero era inútil.
Caminé un poco más, dejando la sangre manchada en la pared. Caminé lo más rápido que pude pero...
- ¿A dónde vas?-...dijo Damián detrás de mí.
Me paralicé y él me tomó de la nuca con fuerza, arrastrandome por el pasillo hasta llegar a dónde estaba el alboroto.
- ¡¡QUÉ LE HAS HECHO A MI HIJO Y MI ESPOSA!!-... gritó Tom, mientras Bill reía con algo de arrogancia.
Cerré mis ojos fuertemente evitando ver a Tom en ese estado.
- ¡¡Solo hize lo que debía haber hecho, estás segado Tom!!-...dijo Bill.
En ese momento comenzó de nuevo el alboroto.
- Vamos, entra a esa habitación -...dijo Bill con su tono de arrogancia.
Abrí los ojos lentamente y era la habitación de la cuál yo había salido. Mis ojos se inundaron más, sin poder evitar las lágrimas.
Bill le abrió la puerta y en ese momento Tom calló al suelo, gritando de ira y dolor. Se levantó y atacó a Bill dándole golpes en ese instante, Bill solo reía como un maldito loco y Damián igual reía.
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CICATRICES EN SILENCIO (2)
Misteri / ThrillerSegunda parte de SILENCIO PERDIDO..... Las cicatrices son marcas permanentes en el corazón y visibles en la piel.... Pero al verlas y recordar el causante de ellas duelen más que el ardor latente de la herida que estubo ahí.... Gracias por leer SILE...