Parte 14

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Jade ya se encontraba en su vestidor, mientras su fisioterapeuta realizaba su tan necesario masaje postcombate. No podía dejar de pensar que su triunfo por sobre Alexa Grandón le había dejado un sabor agridulce en la boca.
Aunque ganó por sumisión en forma magistral probándole a todo el mundo que seguía siendo la mejor, no podía desconocer que en un minuto sintió miedo cuando estaba sobre el octágono, sensación que no la invadía desde hacía muchos años atrás. Fué el mismo temor que la embargaba cuando su padrastro la golpeaba y ella aún no se sentía capaz de defenderse, era el miedo a quedar paralizada sin poder devolver el golpe.

Eunu tomó una silla y se sentó a un lado de Jade, mientras aún estaba en la camilla de masajes. La miró serio, aunque se sentía feliz por el triunfo,  su cara denotaba un dejo de preocupación por como se había desarrollado el combate, su ceño fruncido lo delataba.
Por mientras Kimmy con igual expresión de preocupación los observaba de cerca, muy seria con su espalda apoyada contra la pared y sus brazos cruzados sobre su pecho.

- ¿Cómo te sientes Jade?, ¿Te duele mucho tu cara?- preguntó Eunu alcanzándole un nuevo pack frío para que pudiera colocarlo sobre su pómulo.

La herida requirió algunos puntos de afrontamiento, posiblemente dejaría una cicatriz en su pómulo.

- Estoy bien Appa, solo fué que me sentí diferente esta vez mientras peleaba. Veía la desesperación de Grandón por tratar de golpearme, pero me sentía tan en calma, que no pude reaccionar como siempre, era como si estuviera viendo la pelea desde afuera, me veía a mi misma y la veía a ella, era como si solo me estuviese alimentando de información para poder finalmente ejecutar mi victoria. Nunca me había sentido así, era como si me hubiera estado conteniendo para que al final pudiera salir mi verdadero yo.

- Fué una jugada arriesgada Jade, Grandón te tuvo demasiadas veces en la lona para mí gusto. Solo puedo decir que me hubiera gustado saber que ibas a hacer algo así.

- Appa, no lo planee, solo sucedió, ni siquiera sé cómo logré eso. Si te puedo decir que la rabia que antes me acompañaba durante toda una pelea, solo apareció al final. No se si eso es bueno o es malo para mí, solo sé que pude ganar en forma más efectiva- Jade hizo una pequeña pausa antes de continuar- Hubo un muy breve momento en que sentí miedo, no por la posibilidad de perder, sino por que me ví en una situación que desconocía como manejarla.

- Jade, me gustaría que te tomaras un par de días de descanso y hablaremos con calma como manejar este nuevo enfoque cuando retomemos tu entrenamiento. No creo que sea algo malo, pero si te sientes así, debemos organizar una nueva estrategia para tus combates y sacarle el máximo de provecho- Eunu pudo por fin respirar tranquilo, sabía claramente lo que debía hacer como entrenador de la mejor luchadora de MMA- Tu objetivo no cambiará y este debe seguir siendo que sigas como la campeona invicta. Si tú has evolucionado, tu forma de luchar debe cambiar contigo. Eres una luchadora excepcional Jade y estoy muy orgulloso de ser tu entrenador.

Jade lo escuchó atentamente, no podía sentirse más que emocionada y agradecida por como Eunu la entendía. Sabía que él era el mejor entrenador que podía haber tenido. Eunu se inclinó sobre ella y le dió un afectuoso beso en la frente a modo de despedida, saliendo de la habitación en silencio.

- Adiós Appa, nos vemos en un par de días entonces- Jade se despidió, para luego girarse hacia su fisioterapeuta para ver si ya estaba lista- ¿ya hemos terminado?- preguntó Jade.

- Si señorita Evans, estamos listas, ya puede ir a ducharse. Si tiene alguna molestia el día de mañana, debe llamarme de inmediato. Fué una pelea intensa y es muy importante cuidarla de tener alguna lesión. Y así no tendrá ningún problema para su próxima pelea, nos aseguraremos de que estará en óptimas condiciones.

Jade "La Diosa"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora