Jade "La Diosa"

Parte 11

Después de que Jaekyung se fué del penthouse, Jade se sintió dueña del mundo, se giró para mirar a Kimmy que la observaba seria desde la entrada.

- Jade Evans eres terrible, de verdad no sé que hacer contigo- habló dando un largo y sonoro suspiro.

-Ya haces más que suficiente para hacerme feliz, por algo eres mi mejor amiga y por eso te elegí como mi manager, estaré infinitamente agradecida hasta el fin de los tiempos por que aceptaste el día que te lo pedí.

Jade agarró su bolso y lo dejó caer en la entrada mientras se ponía el calzado para salir. Al incorporarse se abalanzó sobre su amiga para abrazarla y tratar de darle un beso en la mejilla, al cual Kimmy quizo escapar sin éxito.

- ¡¡¡Jade noooo...quizás donde estubo esa boca antes!!

- ¡¡Oye, me lavé los dientes!!...y lo de recién no cuenta. Fué solo un besito con lengua.

- ¡Pero Jade como me dices esas cosas....no puedo contigo!- Kimmy empezo a reír con tantas ganas, que las lágrimas saltaron de sus ojos- vamos que no quiero que lleguemos tarde, en el auto me lo contarás todo, si no tengo a alguien que me ponga así de tan buen humor como Jaekyung te pone a tí, por lo menos quiero morir de envidia, aunque tú seas mi mejor amiga.

Jade no puedo evitar devolverle el cumplido con la sonrisa más radiante que no se le había visto desde hace mucho tiempo, quizás demasiado.

- Ese hombre es de otro mundo Kimmy, no me aburriré de decirlo.

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Ya preparada para la ceremonia de pesaje, Jade Evans pudo escuchar desde tras bambalinas como el público coreaba su nombre, era tan alto el volumen de los gritos que asumió que el recinto estaba lleno a reventar.
En el vestidor no solo estaba Kimmy acompañándola como siempre, sino también su entrenador y todo su equipo.

Jade estaba de tan buen ánimo, que era notorio para Eunu que sea lo que fuere que había tenido a su protegida de un humor de los mil demonios, ya lo había resuelto.

- Jade me alegro verte mejor, espero que lo que te tenía tan irritada lo hayas solucionado.

-Esta todo bien Appa, nada que no podía resolverse con un poco de buena voluntad- respondió Jade con una buena sonrisa en su rostro.

Kimmy casi se ahogó con su propia saliva al escuchar la excusa de Jade, sabía a ciencia cierta, que el famoso problema se solucionó con algo más que solo buena voluntad, menos si la causa del mal humor de la pelirubia era Jaekyung. Jade no pudo evitar lanzarle una mirada asesina de vuelta.

Un representate de la MFC a cargo del evento entró al vestidor para anunciarles que ya debían acercarse al escenario para iniciar la ceremonia de pesaje.

Jade salió del vestidor seguida de todo su equipo, y efectivamente como ella asumía, el lugar estaba a reventar de gente, entusiastas seguidores de la Diosa aplaudieron a rabiar cuando ella hizo su aparición y caminó hacia el escenario donde ya la esperaba su rival.

Su oponente, Alexa Grandón, era una novata recién ingresada a su categoría, de origen americano, se había establecido en Corea durante esa temporada de competencias. Declarada admiradora de Jade desde que inició su participación de manera profesional, por lo menos eso era lo que la prensa deportiva dió a conocer en sus publicaciones en las semanas previas al encuentro.
Para Jade le fué casi imposible mostrar una actitud confrontacional hacia ella, pero una rival era una rival y no una amiga sobre el octágono.

Después del pesaje de Grandón, le tocó el turno a Jade, se pudo ver su perfil en una de las pantallas gigantes dispuestas a sus espaldas, era increíble como el público la apoyaba y adoraba incondicionalmente. Ella amaba a su fanaticada y sabía que mantenerse como la campeona invicta no solo lo hacía por ella, sino que se debía a su público también.