-Yo no sabía lo que me esperaba. Sólo me dejé llevar...Y acabamos... Bueno,así...
Todo empezó un frío invierno parisino. Las luces de navidad iluminaban toda la ciudad. Impaciente,el francés miraba su reloj "Es la hora,qué raro que no esté ya aquí..." . Levantó la cabeza y buscó a un inglés con la mirada.
-Ah...¡Sorry for being late!-El inglés se presentó diez minutos tarde junto a la puerta de una pastelería. Jadeando,colocó las manos sobre sus rodillas y trató de recuperar el aliento.
-No pasa nada,mon cherie...-Cuidadosamente,tomó una de sus manos y la besó. El inglés se quedó perplejo y apartó bruscamente la mano,casi abofeteando a Francis.
-Don't touch me...Sólo hemos quedado para lo que hemos quedado. Eso no significa que sea todo como antes.
Francis estaba dolido por dentro,pero fingió no sentirlo y soltó una leve carcajada. Tras esto,comenzó a caminar.
-Primero quiero parar en una librería...Sé que le voy a comprara mi Mattie~.-Sus ojos casi parecían brillar de la emoción. Sin embargo Arthur le miraba con una mueca asqueada.
-Siempre tan pasteloso...Sólo es un regalo de navidad. Después de la librería vamos a la tienda de móviles y se acabó. Cada uno por su lado .-Hundió la parte inferior de la cara en su bufanda mientras hurgaba con las manos en sus bolsillos ,tratando de distraerse del aura de felicidad del francés.
Tras un buen rato buscando, Francis al fin encontró la librería. Al entrar, inhaló suavemente el ambiente; le encantaba el olor a libros. Pero por un momento dejó de inhalar y suspiró. Ya no olían como antes todo estaba muy modernizado. Había jóvenes probando eBooks y extrañas máquinas que ni si quiera el sabia para qué servían. Mientras buscaba el libro adecuado para un canadiense, Arthur observó la librería con denetimiento. -"Hoy en día hay libros de todo...Incluso de..."Su mirada se desvío a una estantería algo más apartada de las demás. "Érotique...".Sus mejillas de pronto se tornaron a un rojo ruborizado y,mirando con cuidado a los lados, sin que el francés le viera .-Pues luego le reprocharía lo que estaba viendo.- se metió en aquella sección. Comenzó a ojear libro por libro con cuidado,siempre alerta de que no hubiera nadie junto a él, hasta que un libro llamó su atención.
- 50 nuances de...
De pronto ,una risa familiar comenzó a resonar en sus oídos.
-¿Quoi?¿Qué se supone que estás viendo,Artie?
"Oh no. Damn. No no no...Esto no puede ser. "Pensó el inglés.
-Nada que a ti te importe,idiota.¿Has acabado ya con el estúpido libro?
Francis comenzó a reírse asintiendo y levantando el libro para enseñárselo. Luego fue a la caja lentamente,quería disfrutar de la vergüenza que sentía Arthur en ese momento,pero para cuando fue a hacer otro comentario,ya no estaba allí.
-Ahora resulta que no puedo leer estúpidas novelas eróticas... Fucking stupid frog...-Maldecía al francés mientras le esperaba fuera de la tienda. Cuando le vio salir,comenzó a andar sin esperarle un solo segundo. Francis resopló. Sabía que se había enfadado pero,¿tanto? Continuó su paso hasta una tienda donde vendían artículos electrónicos y le esperó mientras ojeaba un libro que había comprado para si mismo.
"¿Quien se cree que es para reírse de mi? Yo no soy el estúpido que lee novelas eróticas,sólo era curiosidad" El inglés continuaba maldiciendole y tratando de justificarse,mientras tomaba el articulo de la tienda. Al salir le vio. No era posible. "No me digas que..."Arthur vio aquel libro sobre las manos de Francis. 50 Sombras de Grey. Se acercó a él haciendo como que no lo había visto.
-¿Nos vamos ya a casa o que? Me estoy congelando.
Francis subió la mirada hasta cruzarla con la de Arthur. Sus ojos azules marinos se clavaban en los verdes del inglés.
Esa mirada era mi pesadilla. No la aguantaba.
Rápidamente bajó la mirada y comenzó a caminar. No . No de nuevo. No quería caer.
-¿Te ocurre algo?-El francés colocó una mano sobre el hombro ajeno,con un gesto de preocupación. Arthur levantó la mirada, una mirada inocente y pura, pero llena de deseo contenido,y Francis,como buen amante empedernido, lo notó. Cerró aquel libro de golpe y lo guardó. Mantuvieron un silencio algo incómodo durante todo el camino -Quizás por que se habian leído la mente- y al llegar,ambos se echaron en el sofá.
-Ahora sólo hay que esperar a que lleguen...-Francis cerró los ojos mientras se ponía una gomilla de pelo.-Respecto a lo del libro...
Las alarmas de alerta del inglés se activaron. Giró la cabeza hacia el ,alarmado. Llevo sus manos a la boca del francés y se la tapó para que no pudiera decir nada más.
-Just shut up...Sólo fue curiosidad. Sólo eso. No es necesario que me lo recuerdes mas,¿'kay?
Francis se sonrojó, y asintió lentamente. Luego tomó el libro de la bolsa y se lo tendió.
-Solo quería decirte que si lo querías, podías pedirmelo. Feliz navidad...-Sonrió. No como solía sonreír. Era una sonrisa dulce ,tranquila,amable.
Arthur miraba al libro y lo miraba a él, una y otra vez
-Really ...¿De verdad me has comprado algo por navidad?
-Claro, eres parte de mi familia.
El timbre sonó inoportunamente y Francis se levantó a abrir. De pronto lo recordó.
" Don't touch me...Sólo hemos quedado para lo que hemos quedado. Eso no significa que sea todo como antes." Llevó el dedo índice y el pulgar a sus labios,pellizcándolos levemente. Sus mejillas comenzaron a tornarse de rojo y todo estaba en silencio,excepto un ruido.Bum,bum,bum,bum... Escuchaba sus propios latidos. Su corazón había empezado a ir muy rápido,y lo peor es que no comprendía el por qué. Se levantó, de forma nerviosa, y corrió hacia el cuarto de baño, encerrándose allí. Cuando Francis entró junto con Alfred y Matthew.
-Os estábamos esperan-...
El francés buscó a Arthur con la mirada,pero no estaba allí. Los hermanos se miraron extrañados y tomaron asiento. Francis simplemente comenzó a buscarle por toda la casa.
Le odio tanto que mi corazón va a explotar.
-------------------Continuará----------------
Decidme si os ha gustado para seguir con la segunda parte n_n!
