Leo x Aries - BibleBuild

Capítulo 20

«Estaba teniendo un día de mierda hasta que tú llegaste a casa.»

Biu recostado en la cama de Bible. Desnudo

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las horas previas a cada examen final parecían alargarse mientras Biu repasaba y obligaba a Bible o a Queen a preguntarle.

Cuando los exámenes empezaron, el tiempo pasó mucho más rápido de lo que Biu hubiera querido e intentaba, cada vez que terminaba uno, no pensar demasiado en qué podría haber hecho mejor.

Economía Aplicada fue su último examen y se había pasado la tarde anterior paseando arriba y abajo por la habitación de Bible mientras obligaba a este a que le hiciera preguntas desde todos los ángulos posibles.

Cuando Bible dejó de evaluarlo, lo empujó a la cama y ahí también se dedicaron a experimentar todo tipo de posibles ángulos. Y respondió a todos correctamente, arqueándose cuando Bible le metió un dedo, acariciándole la próstata.

Sus gemidos, profundos y hambrientos parecían alimentar la lujuria de Bible. Las manos de Biu dejaban marcas en el culo de Bible mientras se movían como si estuvieran follando.

Porque follar seguía siendo un límite para Bible y Biu respetaba esa frontera que se habían marcado, a pesar de que estuviera al borde de la locura de cuánto lo necesitaba dentro de él.

Cuando al acabar Biu se levantó para estudiar más, Bible lo aprisionó de la muñeca y tiró de él de nuevo hacia la cama.

—Si a estas alturas no te lo sabes, ya no hay nada qué hacer —le dijo tomando un mechón de pelo que Biu tenía pegado a la mejilla—. Pero te aseguro que lo vas a hacer bien.

Biu sonrió. —¿Qué nota me pondría Profesor Bible Sumettikul?

—Necesitas que te infle un poco más el ego, ¿no?

—Sip.

Bible se rio. Se quedaron dormidos enseguida y se despertaron un poco antes de que sonara la alarma, calentitos y a gusto en los brazos del otro. Biu se deleitaba en la sensación del cuerpo de Bible envolviéndole y no quería levantarse de la cama.

—¿Quién hubiera imaginado que abrazarse desnudos podría ser tan increíble? —dijo Biu mientras Bible se estiraba.

—Cualquier hombre con sangre en las venas —contestó Bible arrastrando las palabras.

—¿Quién hubiera imaginado que abrazarse desnudos sin estar buscando sexo podría ser tan increíble?

Bible abrió un ojo. Tenía esa voz ronca de cuando uno se despierta. —¿No quieres sexo?

Negó con la cabeza. —Aunque me encanta hacer que pongas los ojos en blanco y te estremezcas, creo que cinco minutos de esto es lo único que necesito esta mañana.

Con los nervios del examen revolviéndole el estómago, estar pegado a Bible le resultaba más estabilizador que el sexo. Bible, con una mano en el cuello de Biu, estudió su cara detenidamente mientras con su pulgar daba golpecitos en su sien como si quisiera poder leer sus pensamientos.

Una hora más tarde, de camino a su examen, Biu seguía pensando en cómo la mirada de Bible parecía atravesarlo y desestabilizarlo.

Se enfrentó a su último examen creyendo, esperando, que Bible estuviera orgulloso de sus respuestas. Nada más entregarlo, lo único que quería era encontrarle y contárselo todo. Compró unos cafés y se dirigió al departamento de Economía que es donde se encontraba Bible organizando las clases y tutorías.