➽─❥ Caitlyn Kiramman, la bailarina más aclamada de Piltover, se encuentra atrapada en un compromiso forzado con Jayce Talis, su compañero de baile y heredero de una familia adinerada. Con su madre presionándola para que cumpla con las expectativas s...
"미처 말하지 못했어 다만 너를 좋아했어 어린 날의 꿈처럼 마치 기적처럼 시간을 달려서 어른이 될 수만 있다면 거친 세상 속에서 손을 잡아줄게"
lıllılı.ıllı.ılılıılıı.lllııılı. Rough - GFRIEND
1:03 ──⚬──── 3:45 ⇆ ◃◃ ıı ▹▹ ↻
╰┈•┈୨୧┈•┈╯
Caitlyn daba vueltas en su propia habitación, como un alma atrapada en un laberinto sin salida. Su mirada se deslizaba del espejo en la pared a la ventana, reflejando un vaivén de pensamientos incesantes. Suspiraba y seguía cepillando su cabello, una y otra vez, como si cada pasada del cepillo pudiera desenredar las marañas de su mente. Repitió el gesto cinco veces más, cada una con una frustración creciente, hasta que finalmente se dejó caer en la cama, harta de su propia mente.
Su cabeza daba vueltas, un torbellino de pensamientos que no la dejaban en paz. No podía dejar de pensar en cómo aquella chica probablemente ahora estaba haciendo algo ilegal. Se sentía culpable, un nudo en su estómago que no podía desatar, pero a la vez esperaba algo... Esperaba que esa chica volviera. Aunque no quería admitirlo, en el fondo deseaba volver a verla, pues le había robado todos sus pensamientos. Era un desastre en todos los sentidos; sus pensamientos estaban en otro lado y su cuerpo no actuaba como siempre.
Había perdido el control de sí misma y, por más loco que pareciera, se sentía un poco más libre. Era como si la presión que siempre la acompañó ahora se encontrara acompañada de algo nuevo, una presión distinta... menos destructiva pero igual de dolorosa. Una brasa ardiendo suavemente, pero que aún quemaba.
Respiró hondo, tratando de calmar la tormenta en su interior, y luego se levantó de la cama. Ató su cabello con una liga en un rodete perfecto, su forma de imponer orden en medio del caos. Luego salió hacia la Academia de baile de Piltover a paso lento. Jayce ya no estaba en la enorme mansión.
"Probablemente ya está en la Academia", pensó para si misma, algo molesta, pues eso implicaba que tendría que hacer el camino sola. La soledad del camino parecía reflejar su estado interno, una marcha solitaria hacia un destino incierto.
Suspiró y luego salió de la futura "Casa Talis". El camino fue tranquilo para ella, caminó a paso lento aunque sabía que llegaba tarde a su entrenamiento. Cada paso resonaba como un eco de sus dudas y deseos. El aire matutino de Piltover era fresco, pero no lograba enfriar el ardor en su pecho.
Mientras caminaba, sus pensamientos volvían una y otra vez a aquella chica. Se preguntaba si alguna vez podría sacarla de su mente. ¿Qué era lo que realmente deseaba? Esa pregunta se enredaba con cada paso, un hilo invisible que la ataba a una incertidumbre que no podía deshacer.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Llegó a su clase y se cambió rápidamente. Entró al salón y vio a su deplorable instructor. Caitlyn no lo odiaba, simplemente... no era lo mismo. La presencia del instructor le resultaba insípida, una sombra pálida en comparación con la vibrante energía que Vanessa solía aportar.
