El pasado fue mejor, el presente solo apesta

Somos iguales

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— Solo quería distraerme un rato de mi vida de mierda — Aclaró Bee directamente tomando otra cucharada de su helado.

— Ah... okey... — Murmuró en voz baja el rubio desviando la mirada, ¿Bee solo lo usaba para distraerse?, no él era un buen amigo, sí.

— ¡Hey Randy no vayas a pensar que solo te uso o cosas así! — Agregó rápidamente al notar la reacción del contrario.

— Te entiendo, a veces uno solo trata de escapar de su realidad jodida para no sentirse peor de lo que ya esta, ya sea buscando un objeto o una persona — Contestó volviendo su mirada hacía él con una expresión seria.

— Sí, en eso mismo — Dijo asintiendo el pelinegro antes de soltar una carcajada haciendo que su helado casi se callera.

— ¿Qué es tan gracioso? — Pregunto el de ojos miel confundido.

— Solo es que... me entiendes tan malditamente bien, somos iguales — Respondió entre risas.

El rubio lo miro un poco confundido, ¿iguales?, tal vez, tenían casi los mismos problemas, no se llevaban de lo mejor con sus padres presentes y eran igual de rechazados en la escuela, no pudo evitar soltar una risita, tenía razón, eran parecidos.

— Por cierto — interrumpió Randall aclarándose la garganta —¿Por qué no vas el lunes a la escuela? — preguntó mirando al contrario que calmaba su risa.

— Ah... pues eso... iré a visitar a mi abuela, llevo 2 años sin verla — Aclaró el pelinegro sonriendo nervioso, no se esperaba esa pregunta.

— Ya veo... ¿Pero qué haré el lunes sin ti? — Quejó desanimado mirando al chico frente a él.

— No te preocupes, ni que el mundo se acabará — Contestó despreocupado al rubio, para él no era tan malo irse con su abuela, desde pequeño siempre lo trato bien aunque hiciera un desastre en su cocina.

— Te voy a extrañar — Murmuró más para si mismo que para él, realmente le dolió, no quería quedarse solo en todo el receso, ya se estaba imaginando comiendo en el baño por la pena de ser visto tan solitario.

— Tranquilo, apenas regrese te invitaré a mi casa, bueno... intentaré convencer a mi mamá, ya sabes, ni si quiera me quiere dejar salir desde que descubrió lo de las drogas — Aclaró como si nada sonriendo al de ojos claros.

— Sí, eso estaría genial — Animó con una pequeña sonrisa dedicada al contrario.

— Aunque hoy en la mañana le dije que iría a ver a un amigo y me regaño, así que dudo que me de permiso para invitarte — Aclaraba desanimado.

— No le vieras dicho eso para que no preguntara nada — Respondió tratando de animar a Bee.

— No, no lo entiendes, de todos modos me regañaría, pero como dije, intentaré convencerla para dejarte ir — Corroboró rápidamente, quería hacer feliz a su amigo.

— Solo hay que esperar — Agregó a él con una suave sonrisa.

Ugh... vida ingrata.

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Acá otro capítulo casi una semana después, diría que no tenía ideas pero estaría mintiendo, en realidad tenía flojera perdón :"V