El pasado fue mejor, el presente solo apesta

Padres

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• 7 años antes... || Continuación del capítulo "No me importa"

Era hora del receso y para sorpresa de nadie, Randall fue seguido por su "nueva amiga", intento huir y esconderse multiples veces pero la niña no dejaba de seguirlo ¿a caso no sabía que él era un ratón de biblioteca y solo quería un poco de paz? Había olvidado su teléfono así que lo único que le quedaba era oír todo lo que hablaba la chica, "Blah, blah, blah" era lo poco que podía escuchar, no se esforzó mucho en ponerle atención y solo intentaba imaginar que ella no estaba allí.

— ¿Y qué te gusta hacer a ti? — preguntó la chica con una dulce sonrisa sacando del trance al de anteojos redondos.

— Estar solo leyendo — dijo el rubio secamente sin mirarla.

— ¡Oh, también me gusta leer! — dijo emocionada la de cabello castaño.

— Dudo que sea literatura real, tu comprensión lectora debe ser terrible — quejó el chico con molestia mirándola con desaprobación.

— Uhh... me leí el "Principito" — dijo con nervios ignorando aquella queja.

— Es un gran libro, pensé que solo leías cosas de princesas y así — aclaró con un poco de incredulidad.

— Esas cosas ya son muy infantiles, prefiero algo de grandes — admitió la chica sonriéndole.

Randall se sorprendió un poco ante sus palabras y volvió a mirarla con un semblante más relajado. — A mi madre le gustaba mucho Edgar Allan Poe y Lovecraft, aún espero que regrese por sus libros... — aclaró suspirando un poco desanimado.

— ¿Te los presto? — preguntó confundida la niña.

— No, ella se fue y los dejo en casa. No ha regresado desde hace 3 años, supongo que regresará por sus libros, pero hasta entonces supongo que espera que los lea. — aclaró con un suave asentir.

— ¿Estas diciendo que volverá a felicitarte o algo así? — preguntó la chica aún más confundida.

— ¡Por su puesto que sí! de seguro se fue para acercarme más a la lectura, volverá cuando termine los dos libros que dejó ¡Tal vez hasta viajo a conocer a Allan Poe y Lovecraft! ¡Quizás me traiga un autógrafo! — dijo con emoción.

— Entonces... ¿no tienes mamá? — preguntó la de cabello claro directamente.

— ¡¿Qué?! ¡Claro que tengo! solo no sé dónde está, que mala comprensión tienes. — dijo un poco molesto por aquella pregunta.

— Mi mamá está en mi casa — aclaró la niña encogiéndose de hombros.

— ¡Pues claro! eso es obvio, nuestros padres están en casa. — quejó Randall mirándola como si fuera una tonta.

— Pero, tu mamá no está en tu casa — afirmó la joven confundida.

El chico sintió que hablaba con la pared, la contraria no parecía entender nada de lo que decía, su mamá estaba de viaje probablemente. Nunca le preguntó a su padre nada de ella porque probablemente se molestaría o como siempre estaría borracho y no comprendería ninguna de sus preguntas, Randall sentía que nadie lo entendía, se sentía solo en este mundo sin sentido, si su madre estuviera allí probablemente sería la única que intentaría y al final lo entendería.

— Mejor cambiemos de tema... — murmuró el rubio cansado.

— Esta bien... — dijo Linda moviendo sus pies un poco. — ¿Cuál es tu animal favorito? —

Esta seria una conversación aburrida...

"Jamás debí decirte lo de mi madre"

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