-l-

406 10 0
                                    

NOTAS DEL AUTOR:
Los pensamientos están entre comillas " "
Los diálogos los indica el guion - -
Un cambio de escena -x-
-x-
"¿Lo recuerdas? Mientras tu te aferrabas con fuerza a la vida, yo...estaba en una profunda soledad esperando por ser rescatada..."

Sakura Haruno se encontraba en su tercer año de secundaria, para ella no había cosa más importante que sus estudios.
-no hay cosa más importante que tus estudios- dijo su madre. La señora tenía una pluma enredado en su cabello rubio mientras hacía cuentas con la calculadora, se detuvo para mirar a Sakura Atraves de sus gafas pesadas -ese 9 no me agrada- aclaro seca.
-lo sé- dijo Sakura desviando la mirada, aquellos ojos miel la escudriñaban con tal afán que le provocaban infinita molestia. Miro por encima de las escaleras que abrían paso a la planta de arriba, que a medida que esa charla se prolongaba le parecían mas lejanas. Cada vez que su madre hablaba, las escaleras parecían extender su distancia aun mas -lo sien...to- dijo de manera apocada.
-pues...- la señora haruno se detuvo por unos segundos y miro el reloj, las siete de la noche era el perfecto momento para guardar su pesado trabajo y ir a comprar los víveres para su cena, así que detuvo su trabajo y se levanto de la mesa mientras continuaba hablando- no permitiré que heches a perder tu vida con actitudes mediocres... Necesitas ir a tu cuarto y reflexionar.

Los puños de Sakura se apretaron y fue incapaz de decir nada, tan solo se limitó a dirigirse a las escaleras. Subió 3 escalones para de nuevo escuchar la voz de su madre -sabes Sakura necesitare un ensayo de lo que no supiste del examen y además una carta donde te comprometes a no fallar. Para el viernes.
Las palabras de su madre aun resonaban su cabeza, su cuarto estaba oscuro y silencioso, desabrocho lentamente el suéter verde de escuela y lo dejo sobre la silla de su escritorio. Se tendió en la cama y giro su rostro en dirección a la ventana. La noche había caído tan lentamente. En sus manos estaba ese examen en el que había fallado dos preguntas.
¿Desde cuando la vida se había vuelto tan lenta y aburrida?
La luz de la calle alcanzaba a reflejar un par de estantes en su cuarto repletos de libros, todos ellos leídos y llenos de notas por ella misma. Y un pequeño llavero de un avión rojo.
Sus labios se curvearon, ella podía recordar mejores días, ella había vivido mejores cosas.
-x-
-estoy en casa- dijo el señor Haruno entrado, la casa estaba tan callada y ordenada como siempre.
Dejo su chaqueta café en el sofá, su cabello estaba desaliñado, después de una larga jornada de trabajo, su cintura dolía, y su estómago estaba gruñendo.
Como era de esperarse nadie contesto su saludo. Miro aquel televisor carísimo que compro hacia un par de meses. Su esposa dijo que necesitaban uno, lo curioso es que solo recordaba haberlo visto encendido dos veces.
-muero de hambre- susurro para si dirigiéndose a la cocina. Una cocina que parecía más de muestra.
-nada...- suspiro con cansio al mirar la estufa impecable. En el refrigerador solo había comida orgánica.
"-¿porque no comes en el trabajo? El horario de comida es a las 6 de la tarde, no puedo hacer nada por ti cariño! si no comes en tu trabajo ese es tu problema."
Las palabras que alguna vez dijo su esposa resonaron en su cabeza y kizashi apto por tomar una pera del frutero y dirigirse a la sala.
Subio sus pies en la mesita de centro y prendió el televisor.
Sonrió al pensar lo que su esposa diría de ver sus pies sobre la mesita.
Las noticias sobre la alza de precios y el cambio de moneda hicieron que sus ojos se cerrarán lentamente. Pero su sueño era tan parecido a la realidad. Levantándose a las 5 de la mañana y conduciendo por cerca de dos horas una pesada carretera con trafico para llegar a su tedioso y pesado trabajo que se trataba de contar, contar y contar...
-584673739 mas el 10% de iba... Pero la tabla de excel...- dormir y soñar lo mismo que haces debe ser un mal karma - maldicion- dijo conciente - de nuevo soñando con el trabajo. Es mejor que me marche a la cama.
Kizashi apago el televisor y se dirigió a su cuarto. Las escaleras y el pasillo estaban completamente oscuras, así que encendió una lámpara de paso, Poso su mano en el picaporte de su cuarto y giro dudoso la perilla, el cuarto contiguo estaba entre abierto.
-¿Sakura?- pronunció suavemente, para acercarse con sigilo.
Desde el marco de la puerta pudo ver el cuerpo de su hija tendido en la cama. En su mano traía una hoja arrugada.
Kizashi se acercó y prendió la lampara del buró. Tomo de la hoja.
"Examen de ciencias" - ¿porque arrugaría?...Esta niña...-
Coloco el examen sobre el escritorio y miro a su hija por unos segundos.
¡Cuánto había crecido!
Cuando llegaron a aquel suburbio era una hermosa niña de apenas 6 años, llena de energía y curiosidad. Y de pronto se había convertido en una hermosa señorita de 15 años -Fue en un abrir y cerrar de ojos- Ya no era una niña nunca mas.
-hija despierta- movió suavemente el hombro de su hija- acomódate bien, para que duermas mejor.- Hiashi noto de inmediato que su hija tenía fiebre. Una fuerte fiebre pues al moverla no obtenía respuesta.
-x-
La voz de su padre se escucho a lo lejos y Sakura apenas estaba despertando de un sueño pesado, sus ojos dolían, sus brazos.
-¿papa?- llamo suavemente, lo primero que vio fue a su papa que estaba a lo lejos hablando con un hombre de bata blanca. La chica miro su alrededor desconcertada. Se trataba de un hospital. Estaba acostada en una de esas camillas, tenía conectado un suero en la vena que al moverse con brusquedad dolió -auuu-
Sakura se quedo quieta pacientemente esperando por su papa.
La luna que podía ver por la ventana estaba redonda y amarilla. Una luna hermosa.
-maldicion- dijo siendo consiente de pronto del tiempo, la chica chasqueo la lengua y se colocó de lado. Tenía un par de tareas que acabar y entregar para el día siguiente. Realmente no tenía tiempo de estar allí tendida en esa cama, con "¿suero?".
-supongo que no eres un robot- dijo su papa divertido tras de ella.
Sakura sonrio - no lo soy, pero debería.
-hija- kizashi jalo una silla cerca de la cama y miro con preocupación a su hija, que a la luz blanca del cuarto se miraba tan pálida y delgada. -te has estado exigiendo demasiado. Tienes que relajarte.
Su papa sonaba tan serio al respecto que logró sobre exaltarla un poco.
-Descanzare en un mes que salgamos de vacaciones- aclaro seria.
Kizashi movió su cabeza a modo de desaprobación -duerme un poco, nos iremos hasta que el suero se termine.
-X-
-vamos Sakura ya es hora-
El uniforme de Sakura estaba perfectamente colgado en el baño, con sus zapatos de escuela.
Lavo su rostro, se miro al espejo. Realmente se veía pálida. Tomo el cepillo de dientes y los cepillo por un par de minutos. Luego acomodo su cabello en una coleta y se vistió.
Su papa aguardaba en la sala de espera.
-creí que iríamos a casa- comento Sakura entregándole la bolsa con sus artículos personales.
-pensé que era mejor que reposarás toda la noche.
La hoja de alta estaba por llegar, así que estuvieron sentados por unos minutos.
-¿y mama?- preguntó Sakura de repente.
-...- kizashi hizo una pausa, parecía que algo le molestaba- tu madre vino a dejar tu uniforme y luego se marcho a su trabajo.
-seguro esta enojada- comento Sakura con desanimo.
-después hablaremos de eso.
-listo, aquí tiene señor- la enfermera le entrego el papel y así terminaron el papeleo.
Luego se dirigieron a la salida.
Los pasillos del hospital de pronto le parecieron conocidos a Sakura, la entrada principal y el enorme jardin que estaba a la entrada del hospital.
Un recuerdo suprimido volviendo a su mente e hizo que su corazón se estrujara.
El rostro de un chico llorando...
-papa ¿aquí... Hace un par de años...?- preguntó dudosa.
Kizashi miro a su hija sorprendido - ¿aun lo recuerdas?, tenias 7 años.
-no lo recuerdo del todo. Solo se que aquí trajimos a Sasuke aquel mal día.
-pobre chico. Fue terrible verlo llorar cuando supo que sus papas estaban muertos. Realmente fue una suerte que estuviera en nuestra casa cuando sucedió el accidente de sus padres.
-Sasuke- susurro Sakura con tristeza.
Durante el viaje a la escuela. No hubo otro pensamiento que ocupará su mente mas que Sasuke.
"Ahora mismo ¿dónde y cómo estarás sasuke?"
-fin del capítulo-

¿Lo recuerdas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora