Marido en otro mundo

Capítulo 91: Cooperación

"Shen Mo una vez que planeo ir a ver al señor Qian, que es el líder de nuestro pueblo Liu. Es muy respetado en todos los sectores, y para construir la calle comercial necesitamos su apoyo. ¿Tú y Xiao Yu me acompañarán?"

Zhou Yu había tomado un permiso en la escuela privada para cuidar a su padre herido. El viejo maestro, conmovido por su devoción filial y compadecido por los problemas de su familia, accedió a darle el permiso. Ahora que Feng Wanxian se había ido y aún no se había terminado el permiso, Zhou Jing no estaba apurado por hacer que Zhou Yu regresara a clases, sino que prefería que pasara unos días en casa repasando lo aprendido, para asimilarlo completamente. Zhou Yu estaba dispuesto, ya que Zhou Jing planeaba negociar sobre la calle comercial, una gran oportunidad para aprender. Zhou Jing pensaba que a veces no se debe seguir un solo camino sin mirar a los lados; si uno se enfoca solo en la carrera oficial y ignora el resto, suele ser contraproducente.

Shen Mo estaba algo dudoso. "No es muy adecuado, ¿no? Los asuntos comerciales deberían tratarse en casa. Si me llevas a negociar, la gente podría reírse de nosotros. No hay precedentes para esto en nuestra dinastía."

Zhou Jing lo miró con una ternura que Shen Mo sintió profundamente. Desde que Zhou Jing salió de la prisión, su afecto por él se había intensificado. Lo que antes era simplemente el amor conyugal ahora incluía otros sentimientos. No podía distinguir exactamente qué tipo de sentimiento era, quizás Zhou Jing tampoco pudiera, pero era una emoción más fuerte. Esto los hacía más inseparables, más dependientes el uno del otro, y les permitía confiar en que el otro protegería su espalda.

Zhou Jing no ocultó su cambio emocional y miró a Shen Mo con una mirada pegajosa pero no empalagosa. Su voz era tan suave que Zhou Yu sintió escalofríos.

"Mo Mo, los precedentes existen precisamente para ser rotos, ¿no? Otros pueden romper precedentes, y nosotros también podemos. Además, ¿cuántos precedentes has roto tú, Mo Mo? No hemos oído hablar de ninguna esposa que salvara a su esposo. Tú lo hiciste; de no haber sido por ti, tal vez hoy mi esposo seguiría sufriendo en la prisión."

Shen Mo se sonrojó ante el elogio, especialmente porque el tono de Zhou Jing era demasiado suave, como si no pudiera ocultar la ternura.

"¿El hijo está presente?" Shen Mo miró a Zhou Yu con algo de timidez. Aunque le gustaba el tono de Zhou Jing, no era apropiado hacerlo en presencia de su hijo.

Zhou Yu, bastante tranquilo, dijo: "Madre, está bien. Ya estoy acostumbrado."

"..."

"El hijo opina que el padre tiene razón. Madre, no eres como las esposas comunes. Si te interesa el negocio y puedes hacerlo bien, sería bueno que salieras con padre para aprender. De esta manera, podrás ayudar a padre y, en caso de que él tenga otros asuntos y no pueda encargarse, podrías tomar las riendas para evitar que los gerentes malintencionados del negocio te pongan en dificultades."

Shen Mo pensó que tenía sentido y dijo: "Entonces iré con Zhou Jing para ver cómo va la situación. Si las cosas van bien, me uniré a él en futuras negociaciones. Si surge algún problema, lo discutiremos más a fondo."

Se tomó la decisión y se notificó a Jiang Wei para preparar el carruaje.

Jiang Wei estaba muy impresionado con los carruajes que dejó Feng Wanxian. Sin necesidad de que Zhou Jing se lo dijera, él mismo salió a buscar a los cochineros para aprender cómo cuidar de los caballos. Gracias a esto, para la noche, muchos en el pueblo de Liu ya sabían que la familia Zhou, lejos de caer en desgracia, había ganado dos caballos magníficos. Parecía que la familia Zhou, que antes era silenciosa, había de repente aparecido en el escenario con un gran respaldo. Debido a que este respaldo era demasiado grande, no era fácil de revelar. El anterior magistrado pensaba que no lo tenía y planeaba aprovecharse de ellos, pero no solo no pudo hacerlo, sino que terminó perdiendo su puesto, lo que fue una mala suerte para él.