CAPITULO 31

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LUCIFER

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el dedo en la pantalla de mi teléfono hasta que encuentro el nombre de Devil en la lista de contactos.

Después del segundo timbre me responde y escucho como se disculpa con alguien, supongo que para tomar la llamada.

-¿Si?

-Tengo una pequeña misión para ti.

-¿Así? ¿No me digas?

-Te quiero a las 9 en mi pent-house, llevare a una chica y te la tiraras, te gravare y a quien se lo mande tiene que creer que somos un trio muy excitado.

-Bueno, esos trabajos si me gustan, muy bien te veo ahí.

-Lleva sustancia, la vamos a necesitar.

-Bien.

Guardo el móvil en la bolsa de mi pantalón de entrenamiento, busco mi presa en el área de tiro y la encuentro riendo con unas chicas, me aseguro que Emma no este cercas para que no me eche a perder mis planes. Me acerco a Helen cuando no la veo cercas.

-Ven conmigo -la tomo del brazo con delicadeza y las chicas que la acompañaban se quedan con la boca abierta cuando me ven tan cerca.

-¿Necesitas algo? -miro hacia todos lados antes de recárgala en la pared del edificio.

-Sí, ¿recuerdas que teníamos pendiente un trio? -esconde los labios y se asegura de que nadie nos vea.

-No creo que sea buen momento para Emma...

-¿Quién te dijo que quiero a Emma en esto?

-¿A no? -niego y me acerco para juguetear con su cabello castaño oscuro entre mis dedos.

-Te traigo muchas ganas desde hace un tiempo, y ahora que lo deje todo con Emma no quiero reprimirme más. ¿A ti te importa que Brenan se entere? -esos dos se traen algo desde siempre, algo como Emma y yo, pero menos retorcido según las palabras de Helen, ella siempre ha estado enamorada de él y pensé que el imbécil le correspondía, pero al verlo tan empecinado con Júpiter comencé a dudar demasiado de sus intenciones para con ella.

-El prefirió quedarse con esa tonta pelirroja, pues que le aproveche.

-Bien dicho -paso mis nudillos par el hombro de piel canela se estremece con mi tacto- entonteces a las 7 nos vemos en el estacionamiento, iremos a beber algo primero.

-¿Quién será el tercero?

-Es una sorpresa que te encantara, de igual forma tal vez me arrepiento y te disfruto entera, solo yo -susurro en su oído y le doy un ligero beso, en la mejilla, siento su respiración pesada y me separo de ella triunfante y con una enorme sonrisa.

Camino a mi oficina y veo a Dylan entrenando con sus hombres. Le sonrió y me fulmina con la mirada. Le va a pesar meterse donde nadie lo llama, y ahora que la pelirroja me confirmo que lo bateo como el imbécil que es, más le va a pesar, porque se va a quedar sin una y sin la otra.

Llegada la hora acordada me voy al parqueadero del pentágono después de darme un baño y cambiar de civil. Helen ya me espera sonriente con un vestido corto y provocativo. Le sonrió y quito el seguro de mi auto para que entre en él. La llevo al edificio y entramos al bar, nos sentamos en una mesa lejos de todos y me concentro en emborracharla y darle a probar de mis besos y caricias. Pasadas las 9 se ve y se siente ebria y Devil me informa que ya está en mi apartamento.

Corazones RotosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora