Capitulo 2

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°Harry°

Senti como un pedazo del pastel se quedaba atorado en mi garganta y comencé a toser tan fuerte que escuché los paso de tío Vernon en el pasillo mientras me gritaba que me callara ya que estaba tratando de descansar después de su trabajo, trate de tranquilizarme ya que si volvía hacer algún ruido iban a abrir la puerta y no queria que me dejaran sin el pastel que me habia regalado Hermione, el cual no estaba mal ya que había compensado el azúcar con miel, pero en todo caso era mejor que el arroz guardado y esa rebanada de queso si así se le puede llamar, no había entendido muy bien la carta de Hermione ya que no sabía como era posible que un hombre tenga hijos o que una mujer pudiera embarazar aún hombre, no le acababa entran en la cabeza y tenía muchas preguntas, pero lo unico que si habia entendido era que si era un Alfa o un Beta no sería tan complicado pero si llegaba a ser un Omega, sabía que las cosas se iban a complicar más de lo que ya estaban con todo lo que ya tenía con el asunto de Voldemort, pero lo que en verdad me preocupaba eran los síntomas que me había comentado Hermione pero no sabía cuáles podrían ser.

Escuché el sonido de la puerta abrirse a la mañana siguiente y vi que era tío Vernon el cual me dijo que me dejaría salir al baño para después volver a encerrarme, salí y fui al baño lo más rápido que pude ya que me moría de sed y hiva a aprovechar para llevar un vaso de agua de la cocina, pero mientras me servía el vaso ví por el rabillo del ojo a mi Dudley, sorprendentemente sin su juego y mirándome como si fuera la primera vez que me veía en toda su vida con algo de superioridad.

Hiba a pasarlo de largo hasta que escuché su voz en el momento en el que me dispuse a salir de la cocina.

-No te basta con ser un rarito respecto a la magia sino que también hay más cosas en las que puedes llegar a ser mas raro- me di la vuelta dispuesto a responderle ya que gracias a Hermione sabía a lo que se referia.

- Si, puedo ser raro en otros aspectos pero no entiendo como es qué con esa cabeza tuya puedes llamar a alguien raro si apenas te puedes amarrar los cordones tu solo- me dirigió una especie de gruñido que se apreciaba más como un silbido muy agudo y grotesco.

Para después gritar tan fuerte como pudo mientras veía que tía Petunia bajaba asustada diciendo algo que no era nuevo para mí -Como puedes molestar a mi pequeño, no ves que es muy susceptible y tu eres un malcriado al tratarlo de esa forma- Sin saber nada de lo había pasado hace unos instantes.

Vi como tío Vernon bajaba las escaleras y me dirigia su clásica mirada de enojo que
era algo normal para mí -¿Qué le has hecho ahora a Dudley mocoso?- trate de no poner los ojos en blanco pero me resultaba casi imposible ya que siempre me culpaban prácticamente de todo lo malo que pasaba.

-Nada solo le dije que no hablara de la palabra con M- Sabía que nos les gustaba la palabra magia ni nada que se le parezca -No le he dicho nada más verdad Dudley- Ví como abrazaba a tía Petunia con más fuerza y movía la cabeza de abajo hacia arriba dando una respuesta en que estaba en lo correcto.

Me iba a dirigir a la habitación para dejar todo por la paz pero escuche el grito de tío Vernon me dirijo.

-¡No te vuelvas a acercar a Dudley o no volverás a ese dichoso colegio de chiflados!-Cerre la puerta detrás mío para no volver a contestar algo imprudente mientras escuchaba el tintineo de las llaves que traían para volver a encerrarme.

Pase toda la tarde preguntando el que síntomas llegará a tener ya que no había tenido ningún síntoma o eso suponía porque me sentía relativamente normal, y pensé que Hermion talvez había entendido mal la información y tomé la decisión de no darle más vueltas al asunto, mientras esperaba en la ventana a alguna lechuza con una carta.

Cuando ya estaba casi por anochecer ví dos lechuzas acercarse hacia mi y abrí la ventana lo más antes posible, para que entraran.

Dejaron las cartas y un paquete en la cama, salte a ver qué era, primero abrí el paquete el cual contenía un pedazo de pastel de chocolate y un suéter tejido por la señora Wesley en el tenía una "h" muy pequeña grabada en la parte inferior del suéter, me lo puse ya que esa noche hacia mucho frío y era muy abrigador se lo iba a agradecer más tarde a la señora Wesley siempre me enviaba algo por navidad o mi cumpleaños.

Después decidí que primero me comería el pastel para después abrir la carta que venia con el, era de ron ya que la letra era muy descuidada.

Hola Harry espero que te encuentres bien te deseo un feliz cumpleaños y espero que esos muggle no te hayan tratado tan mal este Verano, talvez ya te lo haya dicho Hermione pero te quería decir que no te asusté si llegas a tener alguna fiebre o sientes que hay algun olor que transmite tu cuerpo, solo sería la presentación de tu casta y si no has tenido estos síntomas significa que eres un beta, lo cual esta bien ya que no tienes que pasar por el proceso de celo, emparejamiento o tener una marca, es como asi decirlo más fácil de llevar, diciéndote esto espero que te encuentres bien y también te quería comentar que estoy en un viaje a Egipto con mi familia visitando a Charli ya que a mi padre le dieron unos galeones por su servicio al ministerio y te mando en la parte de abajo del paquete el recorte del Profeta ya que creo que no te lo pueden enviar a tu casa nos vemos unos poco días antes de tomar el tren ya que el viaje se alargo.

Espero que hayas pasado un buen cumpleaños y que te hayan dado el permiso para ir a Hogsmeade este año.

Después de leer la carta casi había olvidado el permiso y ya solo tenia dos semanas para que tío Vernon lo firmara y no sabía cómo se lo hiva a pedir.




-Espero les guste nos vemos en la siguiente actualización:3

Un caos para el mundo mágico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora