8: Aprender de tí.

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Un sombrero de hongos

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Un sombrero de hongos.

¿Que? Un lindo sombrero con forma de hongos y algunos hilos colgando con piedras preciosas, con colores que no distinguía, pero le parecía un lindo detalle. El brillo que emitían aquellas piedras le parecía acogedor y algo lindo. Miraba el gorro con curiosidad, tenía algunos de los materiales que Dream guardaba, le parecía curioso, quizás lo usaría de carnada.

Cualquier persona que lo conociera, poco o mucho, sabría que tenía una gran admiración por los hongos, amaba cada pequeño y notable detalle, cada parte, cada dato. Amaba saber mucho de un tema, lo hacía sentirse especial, que era único, aunque de alguna forma sabia que era una obsesión, pero ciegamente amaba esa obsesión, lo hacia sentirse feliz, ciego en su propio mundo.

¿Alguna vez escuchaste el dicho "solo pero acompañado"? George últimamente se sentía asi, solo...pero al mismo tiempo sabia que no estaba completamente solo, aquel enmascarado le hacia compañia.

Pero para eso preferia no tener nada.

Pero para eso preferia no tener nada

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Estaba a punto de golpearlo. El apodo "Gogy" se escuchaba salir repetidamente de la boca del rubio, algunos eran más agudos que otros, a veces tenia ganas de agarrar un fierro y golpearlo.

George, ya fastidiado, lo miro con una mueca de cansancio y exclamo.

— ¿Puedes callarte?

— Déjame pensarlo... - Hizo un sonido de pensamiento para luego sonreír debajo de la mascara y hablar en un tono hipócrita. - Nop. - Dijo agregando y explotando una "P" al final de la frase.

— Eres un infantil.

Dream rio, cosa que irrito aun mas a George, quien ya harto se le acerco con aura de pelea y dio un pequeño empujón.

—Para ser tan delicado golpeas fuerte. - Dijo con una extraña risa, cada día lo sorprendía más, y no para bien.

— ¡Por el santísimo Dios, por favor ya cállate!

—Cállame. —Vacilo en un tono desafiante.

El heterocromático lo miro por unos segundos, saco la navaja que siempre llevaba en su cinturón y se acerco lentamente al contrario para en un movimiento rápido colocarla en su cuello.

— No me refería a esto, pero acepto.

—¿Ah? Eres un loco.

— Pero por ti.

George jadeo confundido para luego ser acorralado en un árbol que estaba cerca de ellos, Dream saco su cuchillo de bolsillo llevándolo al labio del mas bajo.

—Oh, ¿la princesa tiene miedo?

George busco su navaja, se había caído, estaba en el piso, la intento tomar con el pie, dando un golpe como pudo al mas alto en su estomago, asi agachándose para tomar su navaja y acorralar ahora al de mascara poniendo la navaja en su cuello.

—No me vuelvas a tocar o no saldrás vivo de aquí.

—Nos despertamos sensibles hoy.

George solo se quejo con un sonido de disgusto para acorralarlo un poco más. Acerco su mano libre a la mascara y murmuro.

— Sabes, si tan sensible estoy yo, veamos que ocultas bajo esa mascara.

No escucho nada, ni quejas, ni prohibiciones. No había planeado llegar tan lejos pero si se rendia ahora Dream lo llamaría cobarde.

Él no era cobarde.

Comenzó a quitar la mascara aun con su navaja posicionada en el cuello del rubio, se sorprendió con lo que vio: Unos ojos verdes como el color de los arboles en su mejor etapa, una piel tez jazmín, una cara algo magullada con algunas cicatrices, contando algunas en su labio.

Pero lo peor era que lo seguía viendo atractivo.

Dream sonrió egocéntricamente atrayéndolo hacia él haciendo que la navaja del mas bajo caiga al piso, pero ahora eso no le importaba, solo estaba concentrado e una extraña tensión que sentía.

El frio viento soplaba despeinando sus cabellos y moviendo las hojas de los más altos arboles, no había ningún ruido externo, a excepción del sonido de las chinchillas y luciérnagas acompañando el solitario sonido de aquel pacifico lugar. Sus ojos se conectaron por unos segundos, aquellos ojos con distintos colores y aquella visión de ojos verdes penetrantes en el medio de la noche que George podía ver tan atentamente.

Como si hace segundos no hubieran estado amenazándose.

Sus labios se juntaron al compas de la noche, mientras la luz de la luna alumbraba ambos cuerpos y sentimientos.

Ahí George lo entendió todo...

El gorro de hongos no era carnada, era para él.

El gorro de hongos no era carnada, era para él

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Perdón la tardanza, aquí tienen su capítulo...

Élite [DreamNotFound]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora