Habían pasado dos semanas, y la rubia aún no sabía qué haría con el feto en su vientre.
– Realmente no te entiendo, Xen. - manifestó el hombre. – era esto lo que querías, siempre quisiste tener una familia con Sirius, criar sus hijos y continuar el árbol genealógico.
– lo sé, pero no es tan fácil, quería tener una familia con él, pero él ya no está, y no estará nunca jamás. – La rubia suspiró.
– ¿Y qué piensas hacer? ¿Lo vas a tener? – el hombre quería apoyar a su mejor amiga, aunque estuviera tan complicada.
– es que, es lo único que me queda de Sirius, si me deshago de él, me deshago de Sirius. – ella se puso una mano sobre el vientre – quiero tenerlo, pero tengo miedo.
Remus sonrió ante la decisión de su amiga. No podría esperar a tener un sobrinito o una sobrinita.
– sé que ser madre lleva muchos retos e inconvenientes, y no estoy segura de poder afrontarlos todos, menos sin el apoyo de Sirius. Pero este bebé es su último regalo. – sonrió un poco nerviosa.
– Xenia, escúchame, vas a poder, eres una mujer fuerte, yo confío en tí. Sirius también confiaría en tí. – la chica lo abrazó por su apoyo y se levantó a servirse un vaso de agua.
•••
Los meses iban pasando como brisa, y sin darse cuenta, ya estaba entrando casi al tercer trimestre del embarazo.
Su vientre estaba inflado y ya sentía algunas patadas de parte del bebé, que a su sorpresa, era una niña.
– Joder, que niña tan hiperactiva. – dijo poniéndose la mano bajo el vientre y en su espalda baja. – ¿Cómo es que tiene tanta energía para patear?
Remus rió.
– será porque la alimentas con cada antojo que genera. – se burló mientras hacía unos huevos con tocino. – ¿ya pensaste en qué nombre le vas a poner?
– Eleanor. Eleanor Nova Black. – la mujer sonrió satisfecha con su elección.
– ¿Y eso qué significa? Debe tener algo que ver con tu cultura. – el hombre sirvió los huevos con tocino.
– Obviamente que tiene que ver. Eleanor es un nombre con orígenes griegos adaptados al francés y al inglés, y Nova, quiere decir nueva. ¿Creativo, no? – ella se regocijó por el nombre de su bebé.
El hombre arqueó una ceja.
– está lindo. Lo apruebo. – Remus tocó el vientre de su amiga y habló de nuevo – ¿Te gusta tu nombre, pequeña Eleanor?
El vientre empezó a moverse y Xenia rodó los ojos.
– la despertaste. – dijo con desaprobación – ahora no parará hasta la noche, gracias, Lupin.
– No te enojes, solo quería ver si a mí sobrina le gustaba su nombre – se encogió de hombros. – ¿has hablado con Sirius?
Xenia se tensó un poco, pero Remus era como su hermano y no podía ocultarle nada.
– en Azkaban filtran mucho las cartas, nuestras charlas son muy nulas porque no puede comentar nada sobre... Ya sabes, así que solo nos hablamos una vez por semana para informarle como va el embarazo. – Una pequeña lágrima salió de sus ojos.

ESTÁS LEYENDO
Catarsis - H. J. Potter
Fiksi PenggemarEn la tragedia griega, la catarsis se lograba a través de la identificación del espectador con los personajes y sus emociones, lo que permitía una liberación emocional y una purificación de las pasiones. En psicología, la catarsis se asocia con la i...