NO me enamoré de Él | Richard Rios

Capitulo 16

-¿ Sabes a cuantas mujeres ha tocado?- hablo Adrian por primera vez en todo el rato.

No lo sabía, pero aun así no podía darme el lujo de que Adrian de nuevo nos descubriera

-He pasado el suficiente tiempo para conocer a Richard, ellas hacen parte del pasado, y se que mientras ha estado conmigo nunca me ha faltado al respeto- trate de sonar convincente, rogaba que me creyera.

- Richard, cuéntale, anda, dile; como se llamaba la muchacha de hace un par de años, Jimena ah no, Verónica, ella era tu vida, ¿que pasó?, ¿no querías casarte con ella?, no fue por eso que viniste acá al pueblo, para alejarte, respirar, hay algo mal en todo esto Richard, y te juro que si estas jugando con mi hermana; no me importa cuantos años hayamos sido amigos- y se fue, a no se donde, mi cabeza está hecha un lío.

Y estábamos solos los dos, este hombre, por el que he llorado tanto tiempo, en un abrir y cerrar de ojos es mi prometido y próximamente mi futuro esposo.

- Vamos, necesito hablar contigo- estaba tenso y enojado se notaba a lenguas

- ¿No puedes hacerlo aquí?, todo ha sido muy rápido, también necesito procesarlo  todo.

- Laura no te estoy preguntando si quieres o no, vamos ha hablar en otro lugar- me tomo del brazo para que lo siguiera pero ahí entro mi hermana.

- ¿Se van?-

SI, lau quiere descansar un rato de todo esto, todo lo que esta pasando, el compromiso, la tensión de tus padres, y Adrian la llevaron al limite- mari se quedó esperando mi respuesta.

- Si mari, todo esto me tiene algo mal, necesito salir para despejarme- Ella asintió y se despidió, así salí con Richard hacia el carro.

.....

En todo el camino Richard no dijo nada, y yo tampoco, no podía descifrar nada en su cara, su silencio era claro, no debía preguntar.

Ya me estaba comenzando a desesperar, había pasado una hora ya, iba a hablar, muchas preguntas y ni una sola respuesta, pero Richard estacionó el carro, no había ningún flujo de carros, un área completamente sola.

- me miró desesperado, poso su mano en mi cara, la tenía fría, y se acercó hacia mi boca, pero no me besaba.

- ¿Por que?, No saldremos fácil de esa mentira.

-Te necesito, Gatinha.

- No soy algo desechable Richard, tu no me quieres- mis lágrimas salían en silencio

- Déjame todo a mí- sus palabras estaban cargadas de algo más, y me da miedo, que este peor que antes.

- No quiero casarme con alguien que no me quiere, merezco ser Feliz por favor, solo tenemos que decir la verdad- me niego a atarlo a una relación que no desea el y que sea solo la esposa bonita en televisión pero detrás, la pobre esposa a la que engañan.

- Déjamelo a mi Gatinha, quieran o no tus papás, tu te vas conmigo; quieres quedarte en un lugar más privado?

Quiero quedarme en tu habitación contigo. No hace falta trataré de convencer a mis papás.

- Quedate conmigo- ahora estaba más cerca de mi.

-¿Para que?- su mano me acariciaba el mentón.

- Solo quédate, solo por esta vez- sus palabras tenían otro trasfondo que no podía entender, mi cabeza me decía que dijera no, y mi corazón me animaba a quedarme y que no desconfiara de él.