Los chicos este año se estaban enfrentando a nuevos desafíos, sus vidas estaban cambiando drásticamente y uno de los mayores cambios para todos era que ahora estarían en un nuevo colegio, con nuevos compañeros. Con todo lo que sucedió con Adrien, Marinette realmente esperaba que le tocara en el mismo salón que a él, ella quería ayudarlo y apoyarlo, pero en su lugar...
—Tenemos que mantenernos alejados de él, agente rosa —Nino se sentó al lado de Marinette y comenzó a susurrar.
—¿Agente rosa? ¿Pero nuestros nombres en clave no eran relacionados a la comida? —preguntó Marinette a modo de susurro también.
—Eso era el año pasado, ya crecimos, no podemos usar lo mismo, es muy vintage —Nino negó con la cabeza —. Por eso yo soy el Agente gorra y tú la Agente rosa. Ahora lo importante es alejarnos de él, es demasiado gris —explicó Nino.
—Claro... entiendo... —Marinette simplemente asintió. Ahora que ella era compañera de Nino, Alya le había pedido que lo cuide, porque a él le gusta mucho hablar con todo el mundo, pero no todos lo entienden.
—Félix parece un espía, siempre serio, nunca habla con nadie... lo mantendré vigilado, pero sin que él lo sepa.
—Bien, yo también lo vigilaré —Marinette simplemente le seguía el juego a Nino.
—Esa es la actitud, Agente —Nino palmeó su espalda.
Durante la clase Marinette pudo ver que por lo menos en su salón de clases había más compañeros antiguos, como: Rose, Kim, Iván y Sabrina. A ninguno le tocó junto a su pareja, ironías de la vida. También había muchos compañeros desconocidos, aunque ellos se conocían y hablaban entre ellos.
Cuando el recreo llegó, Nino salió corriendo. Marinette sonrió, seguramente quería ver a su novia. El amor era algo muy lindo, sobretodo cuando era correspondido. Cosa que tristemente a ella nunca le sucedió.
—¿Sigues vigilándome? —escuchó la voz de Félix y enseguida lo observó. No pudo evitar sonrojarse notablemente ante eso.
—¿Cómo pudiste escuchar eso? Te sientas lejos de nosotros.
—Cuando eres un lobo solitario como yo, tienes buen oído —explicó —. Además, tu amigo habla bastante fuerte, creo que cualquiera podría escucharlo.
—Bueno, Nino es algo ocurrente y le gustan los juegos, por eso habla de ese modo y creo que te ve como un espía, porque eres misterioso —explicó la azabache.
—Misterioso —Félix sonrió —. De acuerdo, entonces ese chico no es tan tonto como yo creía, sabe leer bien a las personas —el rubio comenzó a guardar sus pertenencias y después iba a salir del salón —. Espero que no me vigiles todo el tiempo, porque si comienzas a seguirme, déjame decirte que eres una pésima espía.
Marinette no pudo evitar reír ante esa broma.
—Vaya, no pensé que tú supieras hacer bromas, Félix.
—No es algo que haga seguido, simplemente estoy tratando de tomar las cosas del mejor modo posible y dicen que el humor ayuda un poco —respondió. Después asintió con su cabeza y salió del salón, tenía que caminar un poco, le gustaba estar sentado, pero también le aburría.
—Vaya, ese chico ha cambiado desde la última vez que lo vimos... —susurró Tikki.
—Sí, creo que la vida de ambos rubios cambió radicalmente... —la azabache suspiró, se sentía bastante triste por ambos, quería ayudarlos, pero no sabía cómo hacerlo y eso la hacia sentir mal. Ella sentía que debía estar alerta siempre, eso también la mantenía inquieta.
¡Holis!
¿Otro calendario Felinette? ¡Sip! Saben que no me gusta escribir solo un calendario, me aburre un poco, jajaja.
En este calendario se irán enamorando de a poco, amo escribir los sentimientos cuando van naciendo. ❤
¿Les gustaría también un calendario Adrinette con estas palabras? Lo estoy considerando, jajaja.
¡Gracias por leer! ❤
