Una noche, después de un concierto en, Beny decidió salir a dar un paseo para despejar su mente. Caminando por las tranquilas calles, se encontró con una pequeña cafetería aún abierta. Entró y se sentó en una esquina, disfrutando de la tranquilidad...
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Narra Beny
Deje a Ana en su casa y fui con el coche a todo velocidad hacia L'Hospitalt. En cuanto me llamo Morad, se me hirvió la sangre, sabía que no debéis verme así Ana, pero esque como esos gilipollas le hicieran algo a alguno de los míos, os juro que le mato.
En cuento llegue se estaban peleando, gritándose y de todo. No era normal lo que estaban liando allí.
Imaginaros como fue la pelea, que no paro hasta por la noche. Acabe muy mal, pero ellos peor. No sabía que hacer, no me quería ir a mi casa. Necesitaba verla a ella.
Tenía sangre en la nariz, el labio y la ceja. Si estaba echo un cuadro. Como no podía coger el coche así, decidí ir hasta casa de Ana andando, aún que estuviera a media hora andando.
Sabéis, el miedo que yo tengo de enamorarme es que vuelva a pasar algo así y le hagan algo a la persona que quiero, es que en esa situación si que me volvería loco y no podría parar.
Quería escribirle, pero se me olvidó el móvil en el coche. Le quería avisar para decirle que iba hacia su casa, pero no puede, supongo que será sorpresa, aún que ya verás la cara que se le va a poner al verme así.
Al llegar a su casa, la cancela estaba abierta, así que no llame al telefonillo y subí directamente hacia su casa. Llame al timbre pero no abría, asi que empecé a dar golpes en la puerta por si se abría.
Tardo un rato en abrir, supongo que estaría dormida.
Narra Ana
No paraban los golpes en la puerta, estaba muy asustada, me levante de la cama para mirar por la mirilla pero estaba todo muy oscuro.
No se con qué valor abrí la puerta, pero lo abrí.
Al abrirla me encontré a Beny con la cara entera sangrando y entro a la mia son ni siquiera decirme nada.
No sabía que hacer, son enfermera si, pero que cojones la ha pasado.
—Beny –dije acercándome a él, las manos hasta me temblaban. —Que coño te ha pasado –dije acercándome con las manos temblorosas hacia su cara. —Estas sangrando mucho –dije para después correr y ir hacia el botiquín para curarle las heridas.
—Relájate Ani –me dijo. —Llevo con la sangre desde L'Hospitalet hasta aquí andando, por cinco minutos más no pasa nada.
—Para que vienes andando, tú eres tonto te lo juro –le dije mientras me sentaba en el sofá con el botiquín. —Que coño te a pasado –le dije mientras agarraba un algodón.
—Nada, una pelea simplemente y ya –me dijo y yo me reí.
—Una pelea simplemente y ya? Te has visto la cara Beny? Vamos a denunciar o algo –le dije mientras le intentaba curar las heridas.
—No, no vamos a id denunciar, no soy un chivato –me dijo.
—Beny no es ser chivato, es que casi te destrozan la cara –le dije para convencerle.
—Te e dicho que no –me dijo enfadado y preferí callarme, el sabrá lo que hacer.
Cuando termine de curarle las heridas, me levante para tirar todo lo que tuve que coger para hacer que deje de sangrarle la cara.
—Ya? –me pregunto y le dije que si con la cabeza. —Perdón –me dijo mientras se acercó a mi.
—Beny, son las 4 de la mañana, llevo nerviosa desde que me dejaste en casa, te e llamado, hasta me e planteado ir hasta tu barrio. He estado a punto de ir. Y ahora vienes con la cara así –le dije enfadada.
—Lo siento Ani, no quería que estuvieras mal por mi culpa –me dijo y le abracé. —Por eso no me gusta que la gente se encariñe de mi, porque no quiero que se preocupen por mi –dijo y entonces le abracé más fuerte.
—Beny, mirame –le dije agarrando su cara con cuidado y haciendo que me mire. —No pasa nada, solo no me gusta que te pelees, pero si vuelve a pasar, ven para mi casa y yo te cuido. Pero porfa no lo vuelvas a hacer –le dije y le di un beso en la mejilla. —Como está morad, también sacando así? –le pregunté.
—Todos igual, pero ellos acabaron peor –dijo y se rio.
—Oye vamos a dormir vale –le dije y el cogió su teléfono y se dirigió a la puerta. —Tu, vente para aquí, no te vas a ir solo, quédate hoy aquí vale –le dije ya que no me gustaría que se fuera sólo.
—Segura? –me dijo y yo asentí. —Pero duermo en el sofá, no te quiero molestar ni incomodar y no quiero un no por respuesta.
—Bueno, vale –le dije y nos fuimos a acostar.
Me dormí del tirón ya que me lleve hasta las 5 de la mañana despierta. Pero por mucho que tenia sueño me despertaba los ruidos que hacia Beny al moverse, ya que me sofa es pequeño para que el se tumbara y estuviera cómodo.
Así que me levante para ver como estaba. Al verle se le notaba que estaba incómodo, así que decidí despertarlo y decirle que se venga conmigo, ya que mi cama era grande y sabía que si quisiéramos ni nos tocaríamos.
—Beny, Beny, Beny –dije moviéndole para despertarle. —Despiértate –dije y abrió los ojos.
—Que pasa Ani –me dijo con voz ronca y los ojos cerrados.
—Vente a la cama, que aquí estás incómodo –le dije agarrándole del brazo para levantarlo.
—No –dijo y se dio la vuelta.
—Pues me meto contigo aquí –le dije mientras me subía encima suya para tumbarme.
—Ana, déjame dormir –me dijo y eso me molestó, no entendía el por que no quería dormir conmigo, no le gusto o no se no entiendo el por que no quería.
—Vale, pues duérmete aquí –dije y me levante enfadada y me fui a mi cama pegando un portazo.
Es que no se si me entendéis, que más le da dormir conmigo? Será porque prefiere no acercarse a mi, o no le gusto o yo que se.
Deje de pensar y me fui a dormir sin querer darle más vueltas. Ya hablaría con él mañana, por que yo con esta duda no me iba a quedar.
