Capítulo 16: La huida
El grupo corrió por la playa, perseguido por el enemigo. Sophia iba delante, guiándolos a través de las dunas de arena.
— ¡Por aquí! — gritó, señalando un pequeño bote en la orilla.
El grupo se dirigió hacia el bote, mientras el enemigo se acercaba. Gabriel ayudó a Esmeralda a subir, mientras Majoo y Tomás se cubrían con sus brazos.
Sophia se subió última, mirando atrás para asegurarse de que el enemigo no los seguía.
— ¡Vámonos! — gritó, empezando a remar.
El bote se alejó de la orilla, mientras el enemigo llegaba demasiado tarde. Sophia siguió remando, hasta que estuvieron a salvo en alta mar.
— ¿Dónde vamos? — preguntó Majoo.
Sophia miró al horizonte.
— A un lugar seguro — dijo —. Donde podamos esconder el cristal y planear nuestro próximo movimiento.
El grupo se miró entre sí, cansado pero aliviado. Habían escapado del enemigo, pero sabían que la lucha no había terminado.
De repente, Esmeralda se acordó de algo.
— ¡El cristal! — gritó —. ¡Lo dejamos en el faro!
Sophia se puso seria.
— Lo sé — dijo —. Pero no podemos volver atrás. Debemos seguir adelante y encontrar una manera de recuperarlo.
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El Secreto Del Faro
AventuraEn un pequeño pueblo costero, había un faro que se alzaba sobre las rocas, guiando a los barcos durante siglos. El farero, un hombre llamado Tomás, había cuidado el faro durante años, pero nunca había revelado su secreto.