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44: Mundo giratorio: Parte 2
Caza o fracaso

Dust 39: Mundo giratorio: Parte 2

((((((((Caza))))))))

("¡Aterrizaremos en dos minutos! ¡Repito, dos minutos!")

El intercomunicador anunció que se preparaban para aterrizar en su siguiente destino: otro pueblo minero en el límite de Mistral. Llegaban por el océano para que las autoridades no pudieran reaccionar a tiempo antes de que terminaran de saquear el lugar. Había sido un viaje largo... pero era hora de transmitir el mensaje.

Naruto y los demás aseguraron sus armas y se colocaron sus máscaras mientras esperaban.

Se dejó la máscara puesta durante el viaje. La mantuvo puesta la mayor parte del tiempo después de aquella pequeña exhibición del mes pasado en el comedor.

Ya nadie se metía con él, pero todos se mantenían alejados por miedo a que los atacara a continuación. Tenía sentido. Para ellos, simplemente parecía que había perdido los estribos y atacado a sus matones como un animal trastornado. De todos modos, el hecho de que les agradara o no no era la razón por la que estaba allí.

Tenía que regresar para ayudar a su mamá.

Lo que significaba que tenía que demostrarle a Danzō que era digno de permanecer a su lado.

En ese sentido él ganó. Rompió la convicción de Naruto, tratando de evitar causar estragos a las personas a las que atacaban y mantener algún bastión de sí mismo mientras era parte del Colmillo Blanco.

Naruto lo odiaba por eso. Y a Adam también, por llevarlo a cabo, pero tenía que proteger a su madre de ellos y si eso significaba ser el mejor soldado Colmillo Blanco que pudiera ser... que así fuera.

Desde entonces, había participado en varias misiones: robando cargamentos de polvo, asaltando suministros de armas y dejando inhabitables los lugares de trabajo mínimos de los faunos.

Ahora él era su soldadito perfecto.

"Ya estamos subiendo". Miró a Mizuki mientras se acercaba a él por la escotilla. El tigre ya no era hostil hacia él, lo evitaba la mayor parte del tiempo. Después de lo que sucedió en el comedor, su orgullo se había hecho añicos. Ya no era el fuerte tigre blanco que quería que todos pensaran que era. Naruto había destruido esa imagen.

Y Mizuki estaba demasiado asustado para iniciar otra pelea.

El Bullhead tembló mientras la nave descendía. Todos estaban armados y listos para su misión.

La escotilla finalmente se abrió y Naruto fue el primero en salir, enganchando un cable alrededor de un gancho mientras bajaba al suelo y al camino de tierra. Tiró de su cable hacia atrás y escuchó a los demás caer a su alrededor, ayudados por su Aura para aterrizar de manera segura mientras todos comenzaban a dirigirse a la ciudad.

Podía oír el sonido del pánico y las pisadas en estampida de los habitantes del pueblo minero que se apresuraban a esconderse. Probablemente los vieron venir cuando el Bullhead sobrevoló. La mayoría de la gente del pueblo parecía estar buscando refugio.

Algunos de los hombres y mujeres mayores salieron a recibirlos con armas u objetos contundentes en la mano. Se lanzaban a la batalla: "¡Sabemos por qué están aquí! ¡Y no permitiremos que tomen esta ciudad sin luchar!". La multitud que estaba detrás de él vitoreó y algunos faunos se unieron a ellos mientras el anciano cargaba contra el miembro más cercano.

Que resultó ser Naruto.

Naruto no reaccionó al hombre que lo atacaba con un bate hasta que estuvo más cerca. Cuando comenzó a atacar, Naruto sacó la espada de su espalda y bloqueó la cabeza del bate con su espada. Deslizó su espada a lo largo del bate antes de arrebatársela de las manos al hombre mayor y derribarlo.

Caza o fracasa: El viaje hacia adelante Donde viven las historias. Descúbrelo ahora