Solo nosotros. (Lit Killah) ✓

5 ||Cumpleaños.

Estaba en el set de Franco Escamilla en un tirando bolas.

-Aqui estamos con Lilith Guarnizo, la colombiana emputada en el rin -Franco me presento y reí.

Empezamos el juego que el por obvias razones me iba ganando, Aldo y Mariana me empezaron a decir que sonriera.

-¿Por qué no te gusta tu sonrisa? -Franco me miro y me encogi de hombros -Vamos tienes que saber.

Reí -Es que cuando yo era niña en mi escuela me hacían mucho Bullying por mis dientes, y me empezaron a apodar "sonrisa de conejo" y desde ahí no me gustó porque se nota cuando lo hacen con burla.

-Lit, haznos el favor de que vuelva a sonreír mostrando los dientes -Franco me sonrió.

-¿Tú también estás con eso? -Dije riendo.

-Es que soy fan de su relación, no, no, no se dice eso, nunca digan eso.

Reí y seguimos jugando.

-Lilith, que tal que si le dedicamos una canción a todos tus haters y esos haters para Yeri, Dalas y no olvidemos a Cry, tal vez no sea tu hater pero no importa. ¡Que los colados vengan!

Aldo y Mariana se acercaron, le pasaron la guitarra a Franco.

-Ojala que en tu casa se te vaya la luz y te quedes sin agua...Que no te puedas bañar.

Reímos mientras Franco cantaba, movíamos las manos de un lado a otro con una sonrisa después de varios minutos, termino de cantar.

-Hasta aquí tirando bolas, fue un honor estar con Lilith y los colados de Aldo y Mariana.

Sonreí y nos despedimos.

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Aldo y Valdo me despedían en el aeropuerto, estaba esperando mi vuelo a colombia.

-Ten cuidado -Aldo me miro y asentí.

-Lo tendré.

-Come bien, cuídate, cualquier cosa de redes me mandas un mensaje y los mando a chingar a su putísima madre -Aldo me miro y asentí de nuevo.

-Estara bien, tranquilo. -Valdo lo miro riendo.

Sonreí y los abrace con fuerza a lo que mi abrazo fue correspondido.

-¿Irán la otra semana a mi fiesta? -Los mire y ellos asintieron.

-Obvio que si, nos gustaría pasar tu cumpleaños mañana pero no tendremos tiempo -Mariana me miro apenado.

-Lo sé, no te preocupes, la intención es lo que cuenta.

Ellos me dedicaron una sonrisa y me abrazaron de nuevo.

-Adios chicos -me despedí de un movimiento de manos y subí al avión.

El vuelo fue de casi 7 horas, al llegar a mi casa eran exactamente las 2:30 am, abrí la puerta de la casa y las luces se prendieron solas, pestañeo varias veces intentando asimilar todo y lo vi a el, parado con un ramo y unos globos en manos.

Solte las maletas y mire a Lit, a Mauro mejor dicho, suspire y me talle los ojos, comprobando que no era un sueño.

-Feliz cumpleaños, niña de la sonrisa bonita -Mauro me sonrió.

-Eres un tonto -sonreí sin mostrar los dientes y me acerque a abrazarlo.

-Pero aún así te gustó. -dijo con arrogancia.

Reí levemente y lo mire, levantando la cabeza para poder mirarlo al rostro.

-Sí, aún así me gustas.