Ikki de Fénix

42 4 0
                                    

Nombre: ___

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nombre: ___

Edad: 15 años.

Rango: Curandera.





Una pequeña ___ caminaba por el santuario, ahora podía hacerlo con más tranquilidad que antes ya que por primera vez en mucho tiempo la verdadera reencarnación de Atena era quien daba las órdenes en aquel lugar, de alguna forma fomentaba la seguridad y confianza de aquella castaña en las sugerencias y disposiciones que recibía.

Estaba acostumbrada a curar las heridas delos caballeros que allí llegaban, después de todo era la curandera en jefe del lugar, siempre que podía viajaba al pueblo para ayudar y era la primera en atender a los heridos cada que había un confrontamiento.

Durante la estadía de Seiya y sus amigos pudo escuchar cientos de historias de los lugares donde entrenaron, el mayor sueño de ___ era viajar fuera de aquel lugar, no negaba que las vistas y compañía eran muy buenas, pero, su corazón siempre le decía que había algo más fuera, que estaba incompleta y aquella pieza faltante estaba más allá de lo que sus ojos podían ver.

Una vez todos se fueron de aquel pequeño recinto que la fémina manejaba ella volvió a su soledad, aquella que tanto odiaba, desde pequeña fue educada y criada para mantenerse allí, el miedo al mundo exterior era su atadura, no entendía, si el mundo era tan lindo y bello como decía ¿Por qué existían caballeros destinados a proteger a los demás? Todo era una vil mentira.

O eso creía hasta una noche, una potente tormenta azotó el santuario, todos estaban correctamente resguardados, después de todo las casas de los caballeros contaban con lo necesario para subsistir al igual que aquella oficina médica; aquella doncella de orbes azules miraba por la ventana, junto a ella las luces de las velas y una pequeña chimenea que brindaba calor a su habitación.

La lluvia caía fuertemente, tanto que los truenos hacían retumbar las ventanas opacando así los golpes en la puerta de entrada, cuando la fémina pudo notarlos se acercó cautelosamente, tenía una varilla metálica en mano y con la otra caminaba guiada por la luz de las velas; abrió la puerta y allí de encontraba un joven de piel trigueña y una melena azul empapada.

Aquel chico sostenía sus costillas y temblaba ligeramente por el frío, ___ no esperó más, lo llevó a la sala de cuidados y rápidamente le quitó la armadura encontrando varios moretones y por sus años de experiencia notó varias fisuras y fracturas; durante toda la noche estuvo tratándolo, se encargó de vendarlo y bajarle la fiebre que comenzó poco después de su llegada, era una noche larga.













Desde aquel inusual día aquella joven recibía las visitas de aquel atractivo joven, durante mucho tiempo ___ vio cientos de caballeros guapos y atractivos pasar por ese lugar, pero claro, había algo diferente en él, algo que a ella le atraía.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 14, 2024 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Hi, I'm ___Donde viven las historias. Descúbrelo ahora