009

48 4 0
                                    

(En el HOTEL)

-¿Qué curioso no?.-dije dejándome caer en la cama.


-¿Qué cosa?.-Dijo_____mientras no se que hacía con sus cosas.


-Que es la primera vez y posiblemente la última que me acueste en esta cama porque ALGUIEN se la adueñó.


-Si, es muy triste.-Dijo sarcástica.


_________ no se que seguía haciendo, posiblemente acomodando lo que tenía fuera de la maleta, en caso de que rentáramos el lugar ese mismo día. Me quedé dormido, no era la mejor cama pero ya me había acostumbrado al suelo que eso se sentía como una nube esponjosa.

Estaba medio dormido y me empecé a sentir raro; fui abriendo poco a poco los ojos y vi a ______ acostada de frente a mí viéndome y sonriendo porque la ingrata me estaba tomando fotos con mi celular, que quien sabe cómo no sentí cuando lo sacó de la chaqueta que llevaba puesta.


-No hagas eso_____.-dije quitándole el teléfono de las manos.


-Ups, lo siento.-dijo con una risita.-ya van a ser las 12.


-Pues vayámonos.-dije levantándome y acomodándome la ropa.


Salimos de hotel,_____ me mostró el diario para ver la dirección y dimos con un edificio de 6 pisos, era sencillo pero se veía un bonito lugar para vivir.


Esperamos al sujeto que atendió el teléfono afuera del edificio.


-Hola, tu debes el el joven que quiere rentar.-dijo dirigiéndose hasta donde estábamos.


-Así es, soy Jos.-respondí.


-Stephan.-Dijo mientras le daba la mano.


-Y ella es _______.-quien también le dió la mano.


-Bien jóvenes, entremos.-dijo y lo seguimos.- Espero no les importe subir 5 pisos a diario.-dijo observando divertido.


-¿Es en serio?-pregunté.


-Si, bueno hasta que reparen el ascensor, se averió hace unos días.


-Bien, aquí es- dijo frente a una puerta en color negro que tenía el número 512 arriba de la mirilla.


Abrió la puerta y nos indicó que pasáramos. Lo hicimos y enseguida comenzamos a recorrer el lugar. Yo estaba viendo la cocina, ______ fue directamente a ver el pequeño balcón que tenía una habitación.


-Espero que tampoco les importe que solo haya una habitación, éste es el mejor lugar que podrán encontrar por aquí y a ese precio, o al menos en apartamentos amueblados.


-¿Te importa compartir habitación?.-Me preguntó, *Un momento, ¿Compartir habitación? Bien me podría mandar a la sala o incluso a dormir al baño, seguro no habla en serio.*


-No.-le respondí.


-Lo queremos.-Dijo _____ animada.


Por alguna razón no nos cuestionábamos, simplemente dábamos por hecho vivir juntos, no se sentía un ambiente raro o incomodo y eso me encantaba.

====NARAS TU====

El apartamento era bonito y siendo nuestra única opción, con mayor razón lo tomamos. El señor Stephan nos dijo que nos dijo que nos podíamos mudar ese mismo día en cuanto supo que llevábamos unos días quedándonos en un hotel, así que eso hicimos.


Fuimos por nuestras cosas y nos instalamos, aún había que comprar algunas cosas pero ya teníamos casa. Nos dividiríamos la renta y los gastos de los servicios así que viviríamos bien.


-Oye ____ ya tenemos que irnos al café.- Dijo Jos, que venía saliendo de la habitación. *¿Desde cuando usaba el diminutivo de mi nombre para dirigirse a mi? Y recordé que así me llamaban mis padres*.


-Si, espera.-Dije poniendo mi libro sobre la mesa de la salita y me dispuse a ponerme los botines.


Salimos del edificio, eran los últimos días de septiembre, ya se respiraba la llegada del invierno y yo tenía que acostumbrarme al mal tiempo, al nuevo camino al trabajo y a la gente del edificio y sus alrededores.


-¿Descansaste?- le pregunté a Jos.


-Si .-dijo.


-Se nota, te ves radiante aunque roncabas como un oso.- dije soltando una risita.


-Uy, lo siento, estaba cansado.-sonríe culpable a lo cual le respondí con otra sonrisa como diciendo , en serio?.- ¿no volviste a dormir?


-No, no pude.- dije mientras seguíamos caminando.


Llegamos al local a acomodar, limpiar un poco y abrimos, era viernes y Alonso nos dijo que habría más gente y tuvo razón no paramos, cafés, bocadillos, platillos, tragos por aquí, por allá hasta pasadas las 2 am.


-Cuando terminen de acomodar esa mesa se pueden ir.-dijo Alonso.


-Está bien, gracias.-dijo Jos que me ayudaba a mover una mesa.


Terminamos, fuimos por nuestras cosas y sin decir más nada nos fuimos a casa.


-Jos en verdad no tienes que quedarte aquí en la sala.



-No tengo, pero quiero hacerlo.-dijo tirándose en el sillón.


-Está bien, gracias.- dije dirigiéndome a la habitación que al parecer sería mía.


Cerré la puerta, me quité la ropa y me puse pijama, encendí la tv pues tal vez ver programas en holandés me enseñaría algunas cosas o mínimo entendería, me metí a la cama y comencé a ver el programa que al parecer era una serie cómica, no hubiese sabido si no ponen ese sonido de risa de fondo.

Sin regreso ® - Jos y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora