El amor del villano.

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La mañana se sentía bastante calmada, pese a ser fin de semana, parecía que no había mucho movimiento en las calles, entre los que andaban por las calles se encontraban dos mujeres vestidas de colegialas, casi parecían hermanas, solo se diferenciaba por el color de cabello y ojos, mientras una tenía el cabello castaño y la otra lo tenía de color blanco, la albina tenía ojos rojos y la castaña tenía ojos miel, por lo demás, ambas eran pequeñas y menudas, ambas usaban trajes de colegialas, se miraban serias y usaban un par de gafas redondas, era casi como ver a dos mellizas caminar después del colegio

—Vamos, Vamos, deja ese libro, nerd, dijo Malfoy que saliéramos a divertirnos, deja los libros en casa.

La castaña molestaba a la albina mientras caminaban por aquellas calles de New Yack, sin embargo, la albina cerro el libro solo para mirar con irá a la castaña.

—Yumi-chop, lo que dijo la señorita Adelina fue que hiciéramos algo fuera de casa mientras ella limpiaba, no que saliéramos a hacer algo divertido, además, está es mi diversión.

La castaña conocida como Riko Kamijou se acariciaba la cabeza por el golpe que le dio Yumi Albarn con su libro, ella siempre hacia esa clase de cosas, por eso no podían llevarse bien, era complicado llevarse bien con alguien como ella, por otro lado, era mejor que hacer deberes en casa como una Maid normal recibiendo órdenes de Adelina Malfoy.

—Se supone que somos colegiales, comportarse como una chica de colegio debería ser importante para nuestro traje de batalla ¿No te lo parece?

Yumi rodo los ojos con molestia, está mujer no tenía remedio alguno, era realmente un dolor de cabeza tener que lidiar con ella, le recordaba a su padre cuando quería hacer cosas peligrosas y estúpidas con su tio Black Star.

—Suenas igual que el imbécil de mi padre, la diversión no necesita ser peligrosa, eres como una niña sin un juguete cuando nuestro señor no está, me sorprende que seas una de nosotras.

Riko miro con molestia a Yumi, mientras está guardaba su libro, en cualquier caso ya no podría seguir leyendo con Riko molestando constantemente su proceso imaginativo.

—Y tu como la estirada de mi madre, no todo se relaciona con el deber, intenta relajarte, además, no haría mal verte más bonita para nuestro señor de vez en cuando ¿No te quieres ganar un besito?

Yumi volvió a Golpear con su Yumi-chop a Riko mientras se ponía roja por la idea de que Everythingman le diera un beso, aún así, era de las Maid más centradas, por lo que recupero rápidamente la compostura antes de responderle.

—El me quiere de la manera en que soy, no necesito esas tonterías femeninas para gustarle, además, solo tendría que pedirle un beso— se aclaró la garganta sonrojada cuando Riko la miro con su picardía usual, aún así no podía evitar pensar  que le daba algo de envidia Riko, ella podía ser tan abierta con su amor por Everythingman y ella era incluso hostil aveces— lo que sea, si estamos aquí afuera es por qué tu no dejas de molestar a Stephanie y Adelina, en cuanto a mi no me gusta limpiar, no soporto la suciedad, pero tampoco quiero limpiar toda la base.

En otras palabras, eran las maids rechazadas que no hacían trabajo de Maid, parecía ser la única función que no cumplían como Maids, lo más básico.

—Vamos, vamos, no seas amargada, eres la poderosa Guadaña de la Muerte, deberías ser más violenta y siniestra, no un ratón de biblioteca, no se cómo terminaste siendo una de nosotras siendo tan mojigata.

Rinko comenzaba a querer llorar mientras recibía otro Yumi-chop ¿De dónde había sacado ese estúpido golpe con un libro grueso? ¿Deberían darle pastas blandas? Sus preguntas se quedaban al aire mientras pensaba que estaba teniendo un día bastante aburrido, para eso mejor quedarse en la base a limpiar, sería más divertido que doña libros divertidos. Yumi se preguntaba cómo terminó con esta mujer loca y molesta, aunque ella tenía un punto, al principio ella odiaba tener que compartir a su jefe con las otras, pero, con el tiempo, había aprendido que más que compartir todas lo amaban y respetaban igual, pero esa chica, Ai Kaminari, le molestaba, hacía que su Haruto actuará como el resto de hombres idiotas que poblaban este planeta, sin embargo, mientras pensaba molesta en eso, noto algo que la hizo hervir de su sangre, tuvo que esforzarse por no dejar salir su sangre negra.

Time Bokan: Yattāman no dominoefekuto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora