Time Bokan: Yattāman no dominoefekuto.

El punto de no retorno.

Era una mañana agitada para la Doronbo Gang ¿Por qué empezar con los villanos y no con los héroes está mañana, se preguntarán? Bastante sencillo, ese día el hijo de Dokurobei se acercaba a la base, por eso, incluso Everythingman, toda la banda se encontraba arreglando la base para la visita que tendrían, aunque no le gustará para nada la idea de tener al hijo de Dokurobei, Dokubon, respirando en sus nucas, sobretodo cuando el tenía sus propios problemas con Haruto, Ai y Gan, no le gustaba la idea de que esté mocoso intentará indagar de más en su vida.

—¿Cómo será el hijo de Dokurobei? Quiero decir, nunca le hemos visto el rostro a ese hombre.

Everythingman tenía curiosidad por el hijo, no le gustaba, pero como señor del conocimiento, un hijo del que no tenía idea era una de esas cosas que le llamaban la atención por la simple razón de que era un conocimiento que quería agregar a la biblioteca y la información de Dokurobei mismo, no podía dejar pasar nada sobre ese hombre, después de todo, debía detenerlo a cualquier costo.

—Ne, yo también tengo curiosidad, por lo que se, Dokurobei es un hombre misterioso.

Everythingman se sorprendió al ver a su inventó por fin aparecerse volando, aquella cerdita voladora que había creado para hacerle compañía a Dokubon, Haruto aún no estaba del todo convencido, pero para calmarlo, Everythingman, programo en la cerdita sus mismos valores y pensamientos, por lo que era bastante rebelde para ser un robot de compañía.

—Neeton, querida, se supone que esperes a que el niño aparezca, arruinaras las sorpresas.

Más que un regaño, Everythingman estaba realmente divertido con la curiosidad que mostraba su creación por quién sería su compañero de aventuras a partir de ahora. Neeton por otro lado sabía que tenía otra función que era vigilar que Dokubon no se metiera en el camino de Everythingman y mantenerlo entretenido, aunque tenía mucho más autonomía que el propio DoronboRoo.

—Yo también tengo curiosidad por mi nuevo compañero de aventuras, querido creador.

Everythingman se rió con diversión, suponía que no se podía evitar, después de todo, ella estaba programada para aprender y mejorarse a si misma, era una autómata eficiente, pese a eso, quería darle una sorpresa al mocoso, no había nada de malo en eso.

—Perdona, Neeton, a veces olvidó que eres una entidad curiosa, ya aparecerá, ten paciencia pequeña, cuento contigo para cuidar de él mientras me ocupo de mis asuntos.

La cerdita sonrió tranquila mientras afirmaba con la cabeza ante las expectativas, Everythingman no necesitaba que Dokubon se pusiera a investigar a dónde iba cada mañana Haruto, no, eso era asunto de ellos dos, de él, era complicado cuando no lograba volverse uno consigo mismo. Everythingman se vio obligado a dejar de divagar cuando sintió una presencia extraña en su entorno, eso solo podía significar una cosa... El hijo de Dokurobei había llegado, Everythingman estaba tan concentrado en sus cosas que no pensó mucho en el horario, pero al menos podría volver a su rutina diaria con normalidad, llegó más temprano de lo que esperaba.

—Bueno, la pesadilla ha comenzado, pero, como diría Hestia, debes respetar tu hogar y a sus integrantes y ahora Dokubon es más o menos uno de nosotros, mientras no sea una amenaza para nuestros planes o para mí...

Doronjo estaba un poco preocupada por esa pausa, pero lo dejo pasar cuando Everythingman sonrió y espero la aparición de Dokubon, se preguntaba por qué tenía un mal presentimiento de la aparición del hijo de su benefactor, Dokurobei. El chico apareció al fin, era un niño pequeño, no parecía tener más de diez años, aunque, lo que más resaltaba para Everythingman, esos dientes grandes y su cabello en dos puntas a los lados como Wolverine le hacían ver gracioso y resaltar entre la multitud o lo haría si hubiera más gente ahí, después de todo, encajaba con el estilo estrafalario de los villanos.