ෆ ᴏɴᴇꜱʜᴏᴛꜱ ʀᴇᴅᴄʜᴀʀᴍɪɴɢ ⁠ෆ

ᴅᴇ ᴠᴜᴇʟᴛᴀ ᴀʟ ᴘʀᴇꜱᴇɴᴛᴇ

Red y Chloe, luego de conseguir robar el libro de cocina malvado. Volvieron a su habitación correspondiente, en donde festejaron el gran logro que habían conseguido.
Se burlaron de Uliana y sus compañeros por su fallida venganza, y se felicitaron entre ellas mismas por haber completado su rigurosa misión.

Red agarró del brazo a Chloe, dejando un suspiro nervioso al no saber como iba a ser su nuevo presente, y accionó el botón de la máquina del tiempo.
En un cerrar y abrir de ojos, estaban nuevamente en la ceremonia de apertura. Más exactamente al final de la presentación de la Directora Uma.

—Ahora soy su nueva directora, ¿Oyeron?— Habló Uma— Y mejor que no se equivoquen, o caminarán por la plancha.

Las risas se escucharon de fondo.

—Solo está bromeando— Se disculpó nerviosamente la Hada Madrina.

—Yo no tuve la oportunidad de estudiar en esta preparatoria, pero como su capitana, me enorgullece trazar un nuevo rumbo hacia un futuro brillante— Dedicó unas palabras la nueva Directora.

En las primeras sillas, se encontraba la Reina de Corazones, quien se encontraba jugando con sus cartas. Esto hizo que Red se tensara, preocupada por lo que podría llegar a suceder.

—Disculpa, ¿Te importaría?— Se quejó Uma.

—En realidad, si— Contestó la Reina Roja.

—¿Mamá, qué estás haciendo?— Pregunto Red asustada.

—Juego mi juego favorito— Respondió dándose la vuelta y mostrando su nuevo vestido de color rojo y blanco— ¡Corazones!

Todo los invitados quedaron impresionados ante tal acto de magia. Red y Chloe no lo podían creer, habían cambiado aquel momento desastroso y lo convirtieron en una hermosa realidad.

Luego de aquella presentación, comenzó a sonar la música y todos se pusieron a bailar felices por el nuevo año escolar.

—Cariño, ¿Dónde estabas?— Preguntó Bridget.

Red estaba anonadada con su supuesta madre. Había tenía cambios drásticos, tanto mentalmente como físicamente.
Debería de empezar a acostumbrarse ya que esto iba a ser para siempre, o al menos, eso esperaba.

—E-em, estaba con... ¿Chloe?— Dijo un poco dudosa de su no tan mentira.

—¿Qué te he dicho de pasartela a escondidas con tu novia, Red?— Sermoneó la Reina de Corazones a su hija.

—¿A mi qué?— La cara de Red comenzaba a teñirse de un color carmesí claro. ¿Chloe su novia? Deberían de estar equivocados, ella no podría estar con alguien tan buena como aquella chica.

—No te hagas la tonta, su intento de esconder su relación fue en vano— Rió Bridget de la cara de su hija.

Red había quedado sin palabras. Su cerebro maquinaba a una velocidad importante, tratando de pensar cómo harían ahora para sobrellevar aquel pequeño problemita. Pensaba en que Chloe podría llegar hasta a desmayarse ante aquella acusación.

Hablando de ella, esa chica de rizos azules se encontraba abrazando a su madre, feliz de que ella estuviera viva y radiante vimos siempre.

—Te extrañé, mamá— Dijo Chloe sin pensar.

—Me extrañarías menos si pasaras más tiempo con tu familia y no con tu novia, bebé— Sonrió Ella.

—¿Qué novia?— Preguntó asustada Chloe.

—¿Red? No creas que no me di cuenta de aquellos chupones que te hizo— Acusó Ella, haciendo que Chloe se muera de la vergüenza.

—¿Qué Red qué?— Chloe estaba comenzando a sentirse muy avergonzada. Era novia de la niña que le gustaba y que acababa de conocer, no sabía si gritar de la emoción o taparse la cara por el comentario que acababa de hacer su madre.