Mis nuevos días

Tragando agua de mar

Ahogándome en mi propio ser,
Nadando hacía lo profundo,
Decidiendo hundirme en mis propias lágrimas,
Arrastrando una ola de negatividad.

Los pinchazos en los pulmones,
Las burbujas mostrándome lo que pierdo,
El silencio absoluto me ensordece,
"Todo esto se lo merece"

Lo salado del agua me quita la razón,
Me culpo por esa decisión,
Por esa y por todas desde que tengo noción.

¿Para qué seguir en la superficie?
¿Para qué contaminar el aire del resto?
¿A caso el océano no es nuestra primer casa?
¿A caso no disfrutaba siempre meterme descalza?

Mi deporte favorito se convirtió en mi mayor miedo,
Mi fobia por las alturas se invirtió,
Y el agua me llama pidiendo que la acompañe en su oscuridad.

¿Quién soy yo para negarme?
Si una sirena me convence de seguirla,
Canto junto a ella aún sin oírla.

El frío comienza a mermar,
Las últimas burbujas las que duelen más,
Ya no intentaré más remar,
Ya no seré esta Mar.

Si hay almas piratas en este océano que vengan a robar mi vida,
Si hay almas de marinos valientes que acudan a defender mi presencia,
Que el océano haga lo que desee conmigo.

Ya no sé que hacer en este presente de agonía y sincera distopía,
Contando las burbujas que pierdo,
Recordando solo los días húmedos,
Privándome de veranos entre mis dedos.