Cap 13

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Cuando comencé a caminar la puerta de madera se abrió detrás de mi, me di la vuelta y ví a ese venado que tanto quiero con su gran sonrisa como ya era costumbre, pensé que le había afectado de alguna manera pero su rostro reflejaba otra cosa

—espera, puedes pasar— habló alastor, y sin que pudiera dar alguna respuesta de parte mía este tomó la canasta que se encontraba en el suelo y entró aquella haciendo que lo siguiera detrás

—amm alastor... Yo quería disculparme por—

—haberme mentido?—

—si...—

—por que lo haces?—

—que?—

—que por que haces esas cosas... Vas y te prostituyen por ahí—

—alastor, yo...—

—Ágata, pensé que entre nosotros había algo!—

Al parecer estaba equivocada, realmente le había afectado, el estaba furioso, su voz era fría y parecía que me regañaba como un padre protector a su hija traviesa y en verdad me dolía mucho haciendo que mi voz se cortaba cada que intentaba hablar

—alastor! Por favor escúchame!, es lo único que te pido!—

—entonces adelante Ágata! soy todo oidos—

—no vengo aquí para que me regañes, vengo con intenciones de disculparme contigo, se que hice mal en mentirte pero de verdad no planeaba que te enteraras así—

Sentía un nudo en la garganta y mis ojos estaban aguados, trataba de mantener las lágrimas pero me era imposible

—Porque lo haces?—

—cuando llegue al infierno me encontre con Ángel y el me dijo que si trabajaba con valentino tendría techo comida a cambio de...—

—prostituirte? —

—si... No tenía nada que perder, cuando estaba viva y era tan solo una pequeña niña mi padre hacia lo mismo conmigo a escondidas de mi madre y jamás tuve el valor de hablar, es algo a lo que estoy acostumbrada y no me agrada en lo absoluto, pero era lo único que podía hacer—

—QUE? EN VERDAD PLANEABAS OCULTARME TODO ESO?—

—pues no pero no sabía cómo decirlo...—

—Ágata querida, porfavor no sogas con esto, tu sabes que yo te quiero mucho pero no puedes seguir así—

—pero yo...—

—nada de peros debes dejar de trabajar ahí, no lo hagas por mi querida, hazlo por ti—

Era un mar de lágrimas, lloraba como una niña pequeña, jamás le había revelado eso a nadie, ni a Ángel, tampoco mi ex esposo, nadie, no se porque le había dicho eso a alastor, pero era una herida que se volvió a abrir después de averla ocultado desde hace años

—si... Pero no es tan fácil, mi alma esta atada a el...— trague en seco y pensé antes de hablar —Sabes que alastor?— me pare de mi haciento y seque mis lagrimas —lo haré! No se como pero lo hare, solo dame unos días en lo que lo resuelvo, pero te lo prometo!—

El semblante del venado cambio por completo, de estar frustrado y triste se sorprendió relajando su rostro al oir mis palabras

—wow, Emm me alegra mucho que de verdad lo hagas Ágata y perdón por enojarme, me altere un poco—

—no te disculpes alastor, es normal jeje—

Ambos nos unimos en un cálido abrazo, parecía que ninguno quería soltar al otro, sin darnos cuenta ambos nta habíamos cambiado de tema completamente y estabamos cenando el venado que Rosie le había mandado a alastor, en un principio no me gustaba la idea de comer eso pero al final accedi, su sabor era ligeramente más intenso que el de la carne de res, la verdad no estaba nada mal, el toque de Rosie al cocinar era exquisito, y eso combinado con el vino y el jazz que puso alastor de fondo era perfecto con la ocasión

¿A quien elijo? (Alastor x Lectora x Lucifer) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora