One Shots [Shawn Mendes]

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Palabras: 5041

-¿Quieres casarte conmigo, Hailey?

La expresión de ella cambió al ver al cantante arrodillado mostrando un costoso anillo, se alejó de él y la sonrisa de Shawn se borró al instante.

-Amor...

- Shawn - suspiró -¿Qué haces?, ¿casarnos?, yo no quiero eso, no quiero que nos casemos. Así estamos muy bien cariño, casarnos arruinará nuestra relación y yo... yo no quiero esto, perdón pero no.

Se levantó y sus palabras no salían, lo único que hizo fue guardar el anillo y mirar todo a su alrededor que estaba decorado con velas, flores y una hermosa mesa, la chica creía que solo sería una cena como las que él le hacía. Al mirarla solo asintió reteniendo sus lágrimas.

-Cielo, no quiero que terminemos —agarró su cara con sus manos -Pero no puedo casarme, no quiero, no está en mis planes - lo miró -No quiero casarme contigo, Shawn.

-Está bien.

Cerró sus ojos al sentir los labios de la rubia pero en ese momento fue él quien se alejó.

-Tú no quieres casarte y eso está bien ¿no?, pero no puedo seguir contigo, Hailey —abrió sus ojos sorprendida -Quiero cosas que tú no. Lo mejor es que cada quien siga con su camino, pero por separado.

-¿Qué?

-Si, es lo mejor.

-Claro que no amor, yo te amo.

-Y yo a ti, pero eso quiere decir que no estamos cómodos - agarró su celular de la mesa -Le pediré al chófer que te lleve a casa, yo... yo necesito irme.

Salió del restaurante ignorando los llamados de la estadounidense, sus manos temblaban un poco y dejó salir sus lágrimas al darse cuenta que la mujer que en ese momento amaba no quería ese futuro con él, los planes de ambos eran diferentes y siempre ha sido de la idea de que cuando las cosas choquen es mejor salir de ahí.

Le dijo al chófer que llevara a la chica a casa. Él salió del lugar para caminar por toda la calle y llegar a la empresa de su mejor amiga, ya era tarde pero sabía que seguía ahí.

Limpió sus lágrimas con su sudadera al sentir como su pecho se apretaba, bajó su cabeza para caminar de esa manera y que nadie lo hablara.

_____ estaba en la sala de reuniones, la pelinegra lucía completamente molesta ante lo que los hombres decían, su equipo solo los escuchaban y negaban con su cabeza ante lo que decían. Ya era muy tarde para estar en el trabajo, pero hasta que no tuvieran una respuesta no se iría de ahí.

-Tu propuesta no es buena para esta empresa, tenemos otra visión a la que tú tienes.

La chica miró a uno de sus arquitectos y asintió al escuchar lo que le decía a los demás, estaba por hablar pero fue interrumpida.