Entre Criaturas y Secretos.

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Un rayo de sol golpeaba el rostro de Lilith, lo cual la hizo despertar casi de inmediato. Al sentir la luz natural en su cara, aún adormilada, se sentó lentamente en su cama. Sus ojos estaban entreabiertos, o así estaban hasta que miró la hora. Faltaban tan solo 15 minutos para su primera clase. Genial, primer día tarde. Miró a su alrededor y no vio a ninguna de sus compañeras de dormitorio; posiblemente ya estaban en el desayuno, y ella aún seguía aquí, recién despertando. Se preguntaba por qué la castaña no la había despertado. Tal vez lo había intentado, tal vez simplemente le dio pena despertarla cuando estaba profundamente dormida, pero no había más tiempo para pensar en eso. Lilith tomó un baño de manera rápida, salió para ponerse su uniforme tan rápido como pudo y después salió corriendo hacia la sala común. Salió del lugar tan aprisa que se podía casi comparar con la velocidad de una Saeta de Fuego. Bueno, tal vez no tanto. Bajaba escalones y escalones tan rápidamente que, impresionantemente, no cayó de cara al piso. La pelinegra caminaba de manera rápida por uno de los pasillos. La noche anterior había estado tan emocionada por su primer día, y como la vida no estaba de su lado, ahora se había perdido el desayuno y llegaría tarde a su primera clase.

Al llegar frente a una enorme puerta de madera, la abrió lentamente para después mirar hacia adentro. No se veía rastro de personas, o no hasta que entró y caminó por el lugar hasta llegar al punto en el que se encontraban sus compañeros. Buscó a Thaddeus con la mirada y, al mirarlo sentado en una de las pequeñas mesas, se acercó silenciosamente para después sentarse a su lado, robando la atención del rubio.

— Demonios, Lilith, ¿en dónde te metiste? — dijo el rubio, divertido.

— Se me hizo tarde — contestó Lilith con una cara de pocos amigos.

— No me sorprende, señorita dormilona —dijo Thaddeus con una ceja levantada.

Lilith solo puso los ojos en blanco y luego se rió del comentario de su amigo. Después, sus ojos buscaban a la castaña entre todos sus compañeros, pero no pudo verla en ningún lugar, ni siquiera con Harry y Ron.

— Que extraño —murmuró Lilith para ella misma.

Decidió ignorar la situación y sacó su libro. Una voz interrumpió sus pensamientos. Era una mujer de cabello rizado, con un aspecto extraño y unos enormes lentes que cubrían sus ojos.

— Mis queridos niños, por favor revisen sus hojas de té.

Lilith miró la taza que se encontraba frente a ella y observó las hojas, pero no pudo encontrarles forma alguna, así que se giró hacia Thaddeus y miró dentro de su taza.

— ¿Te salió algo? —dijo Lilith, mirando a Thaddeus con una ceja levantada.

— No le encuentro forma. ¿Y tú? —dijo el rubio, encogiendo los hombros.

— Tampoco le encuentro forma —dijo Lilith, extrañada, hasta que la profesora Trelawney se acercó.

— Muchacho, ¿puedes tomar la taza de tu compañera? —dijo la profesora Trelawney, mirando a Thaddeus.

El rubio le hizo caso, miró la taza con curiosidad y volteó, sorprendido.

— Veo una ave... —miró nuevamente la taza—. Es un ave fénix.

La profesora Trelawney me miró directamente, un poco sorprendida.

— ¿Qué significa esto? —dijo Lilith con un tono de pequeña preocupación.

— Ah, mi querida, veo que has encontrado un símbolo verdaderamente poderoso en tu taza. El fénix, criatura mítica de fuego y resurrección. Este símbolo es muy revelador y significativo para tu futuro. Permíteme interpretarlo para ti —tomó la taza entre sus manos—. El fénix representa varias cosas, querida Lilith. En primer lugar, es un símbolo de renacimiento y resiliencia. Así como el fénix se consume en llamas y renace de sus propias cenizas, tú también enfrentarás momentos de gran desafío y oscuridad, pero encontrarás la fuerza para levantarte y resurgir. Esto podría ser una premonición de tu propia capacidad para superar la muerte y el peligro, para volver a la vida más fuerte que antes.

❛ 𝐂𝐎𝐍𝐒𝐓𝐄𝐋𝐀𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒. ❜ - Hermione Granger. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora