capítulo 4

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Cuando me dejó  allí , sola, me quede destrozada. Yo siempre había tenido una norma muy estricta con el amor: NO confíes en nadie, NO dependas de nadie, y la más importante, NO te permitas enamorarte. Siempre habia seguido al pie de la letra esto, y hasta entonces  me había ido bien, pero al estar con él me sentía cómoda, protegida y podía ser yo misma. No sé  qué  significaba esto o más bien no quería admitirlo. Acababa de sentir dolor, por una vez en mi vida estaba destrozada y todo por culpa de ese tonto arrogante.
La semana pasó muy lentamente,  y no había rastro de él en las clases, incluso llegué a pensar que se había mudado de nuevo. Esta semana lo estaba pasando realmente mal, aunque bueno. ... había echo un nuevo amigo, se llamaba Josh, tenía un acento británico, era rubio con los ojos verdes y era el típico tío que podía ser perfectamente tu mejor amigo.
No podía dejar de pensar en Jake, hasta soñaba con él todas las noches, todo esto.... me estaba volviendo loca.
-¡Kate!, ¡necesitas salir!, no puedes estar encerrada toda la semana, es sábado y esta noche hay una fiesta. Así que. ... ¡vamoos!, mueve tu trasero Katherine y quítate ese pijama.
-Si no hay más remedio.... dijo Kate.
No me entretuve mucho en arreglarme, me puse  una falda de vuelo negra, una camiseta blanca de tirantes y unos tacones. Me dejé el pelo recogido en una trenza y cogí mi bolso.
-Esto.... Jess, ¿tú  no sabras  por casualidad si Jake estará aquí?-preguntó Kate.
-Mmmmm, pues ni idea, pero como te haga daño yo misma le cortaré las pelotas- declaró Jess.
La conversación no se alargó  mucho más y entramos dentro.  Entonces noté  como alguien me sujetaba de la cadera; y ahí estaba él, mostrándome una sonrisa arrebatadora y dándome la mano para que bailáramos.
Al rato me susurró al oído; -te debo una explicación,ven subamos arriba-.
Acto seguido nos metimos en una de las habitaciones y me hizo sentarme en el borde de la cama.
-Verás, el otro día debí darte una explicación; yo no tengo relaciones sentimentales, solo "amigas" con derechos, no soy como tú, soy un sádico ¿vale?, me gusta infringir dolor a mujeres, me gusta dominarlas, someterlas y también humillarlas. Soy así y tengo esos gustos,  y por si me lo vas a preguntar , no he tenido ningún trauma de pequeño,  tuve una infancia plena, unos padres y dos hermanos que me quieren, pero yo he nacido así. .... Tu me atraes  de una manera muy fuerte, no sé si es por tu carácter irritante, o por cómo me desafías y me provocas, solo sé que podríamos tener una relación, pero sólo a nivel sexual, yo no busco otra cosa.  Yo sería  tu amo y tú serías  MI sumisa y de nadie más, te someterias a mí, yo te daría una buena educación a base de disciplina y castigos. Yo podría llevar tu placer a límites inimaginables y también cuidaría de ti. Todo esto habría que hablarlo tranquilamente, hablar sobre tus límites, sobre lo que me gustaría hacerte y sobre lo que tú  estás  dispuesta a hacer, ¿qué me dices?
Madre mía.... esto es lo que siempre había soñado, era  mi fantasía,  necesitaba esto... este mundo forma parte de mí  y él acaba de ofrecérmelo sin más. ... debo de estar soñando.
-Esto.... por mí sí, estaría bien, y... Jake, sé  lo que es el sadomasoquismo, de echo.... a mí  me gusta.

Continuará......

Nuestra perdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora