- Mezcla de colores -

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POV de KIYOTAKA:

¿Qué está haciendo esa cosa sobre el techo?

Apenas despierto y lo primero que veo es una criatura extraña, sus ojos fijos en mí mientras dormía, como si intentara descifrar algún secreto oculto bajo mi ser.

Al igual que la última vez, ignoré su presencia y seguí con mi día, aunque la curiosidad me carcomía por dentro.

Sabía que debía ser cuidadoso, las historias de aquellos que indagan demasiado en lo desconocido nunca terminaban muy bien.

Cuando me levanté por completo, aquella criatura simplemente se desvaneció, atravesando el techo sin dejar rastro alguno.

Era como si el tejido de la realidad se hubiera abierto solo para dejarla pasar.

Mi mirada ahora se centraba en el lugar donde había estado la criatura. Nada había cambiado a simple vista, pero sentía un cosquilleo inquietante en la nuca.

Como si algo invisible me estuviera observando, mientras más centraba mi mirada, empecé a notar un leve resplandor que no debería estar allí.

La habitación se sentía pesada, cargada de una presencia que desafiaba toda lógica. Era como si el espacio mismo contuviera secretos que no deberia observar.

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Fue entonces que lo ví, aquella criatura había regresado, nuestros ojos conectaron y puedo jurar que una sonrisa se dibujo en aquel ser.

— N-niño!!!

Aquella criatura soltó un grito descontrolado, mi impresión no se hizo esperar, salte por reflejo fuera de mi cama.

Ahora mismo, esa criatura se había abalanzado sobre mí, por fortuna lo evité, pero ahora, esa criatura acaba de confirmar que si puedo verla.

Que es lo que me puede suceder?
Cómo puedo salir de esto?
Morir es una posibilidad?

Las preguntas no dejaban de llegar, mi cerebro analítico buscaba una respuesta para esta situación.

-

— Te encontré ...

— ahhh!

Mis ojos no daban crédito a lo que veía, una nueva criatura apareció de la nada.

Su cuerpo estaba cubierto de una tela negra y su rostro lleno de vendajes, y en sus manos cargaba con una enorme hacha.

-

Tan solo con su llegada, la criatura anterior solo se quedó inmóvil, parecía aterrada, instantes después, la criatura fue sometida y encerrada.

Esto solo provocó más sorpresas dentro de mí, pero mis sentidos me obligaban a dejar la habitación, está nueva criatura era mucho más peligrosa que la anterior.

Por fortuna, esa cosa no sabía que podía verlas, agradezco su llegada, pero también me gustaría que deje mi habitación lo más rápido.

No quiero dormir sabiendo que esa cosa sigue ahí.

-

Tomé la decisión de salir de casa, agradezco que no tengo que ir a trabajar al laboratorio en esta ocasión.

Regresaré por la tarde, si para ese entonces sigue dentro, tal vez debería de considerar mudarme.

Quiero investigar, pero no de esta forma, los riesgos son mayores y la poca efectividad de análisis no me ayuda en nada.

Debo averiguar un poco sobre este mundo, creo que el estudio se llama espiritualidad.

-

Eso, no, que clase de persona es para llevar tantas criaturas juntas en su ser?

Mientras caminaba, un hombre paso por mi lado con un aura sumamente oscura, podía escuchar aullidos de gatos y gruñidos acompañando con cada uno de sus pasos

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Mientras caminaba, un hombre paso por mi lado con un aura sumamente oscura, podía escuchar aullidos de gatos y gruñidos acompañando con cada uno de sus pasos.

Kiyotaka y los susurros dentro de las sombras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora