Nada mas importa

Capítulo 11: Red de Engaño

Shahar se encontraba en su habitación, revisando los informes sobre la operación de rescate del día anterior. La cantidad de evidencia que había recolectado era abrumadora, pero todavía no tenía una imagen completa de la red de corrupción y manipulación que parecía estar en juego. La necesidad de actuar con precisión y rapidez la mantenía en vilo.

El sonido de su comunicador interrumpió el silencio. Era un mensaje de Leo, que la instaba a reunirse con él en la sala de comunicaciones de inmediato. Shahar se puso su chaqueta de combate y salió con rapidez hacia el área designada.

Cuando llegó, encontró a Leo trabajando frenéticamente en su estación de trabajo, rodeado de pantallas que mostraban mapas de la ciudad y datos en tiempo real. La preocupación en su rostro era evidente.

"¿Qué sucede?" preguntó Shahar mientras se acercaba.

Leo levantó la vista, su expresión grave. "Tenemos un problema. Los datos que hemos estado recolectando están siendo monitoreados. Hay señales de que alguien está tratando de interceptar nuestra comunicación y seguimiento."

"¿Cómo es posible?" preguntó Shahar, frunciendo el ceño.

"Parece que hay una intrusión en nuestro sistema," explicó Leo. "Los patrones de tráfico de datos han cambiado. Alguien está intentando manipular o borrar la información que hemos recogido."

Shahar se quedó en silencio por un momento, procesando la gravedad de la situación. "¿Qué debemos hacer?"

"Primero, necesitamos asegurar nuestros canales de comunicación y asegurar que los datos no sean alterados," dijo Leo. "Voy a empezar por encriptar toda la información y desviar el tráfico a un servidor seguro. Mientras tanto, necesitamos identificar a los posibles intrusos."

Shahar se dirigió a la sala de control del equipo de rescate, donde se encontraba el líder del equipo, Julian. La sala estaba llena de equipos y personal en movimiento, preparándose para las próximas misiones. Shahar encontró a Julian revisando un informe.

"Julian, necesitamos hablar," dijo Shahar, su voz cargada de urgencia.

Julian levantó la vista, su expresión preocupada. "¿Qué pasa?"

"Tenemos una intrusión en nuestro sistema. Algo grande está en marcha, y creo que podría estar relacionado con la misión de rescate de ayer," explicó Shahar.

Julian asintió, entendiendo la gravedad de la situación. "Voy a alertar al equipo y asegurarnos de que estemos preparados para cualquier eventualidad. No podemos permitirnos errores."

Shahar se unió a Leo en la sala de comunicaciones mientras él trabajaba para encriptar los datos. El técnico se movía con habilidad, sus dedos bailando sobre el teclado mientras ejecutaba una serie de comandos complejos.

"Voy a necesitar tiempo para asegurar esto," dijo Leo, su concentración evidente. "En cuanto esté listo, podemos comenzar a rastrear la intrusión."

Mientras esperaban, Shahar decidió investigar por su cuenta. Se dirigió a una de las oficinas administrativas donde se encontraban los registros de las asignaciones de misiones. Los pasillos estaban en silencio, y la iluminación tenue añadía una atmósfera de desolación.

Encontró el archivo que buscaba y comenzó a revisar los detalles de las misiones recientes. Lo que descubrió fue alarmante: había patrones en las asignaciones que parecían ser estratégicamente planeados para desviar recursos y atención hacia áreas específicas de la ciudad. Todo parecía estar diseñado para mantener el caos bajo control y desviar la atención de las actividades encubiertas.

Mientras tanto, en la sala de comunicaciones, Leo se encontraba bajo presión. Los datos estaban siendo encriptados, pero la señal de la intrusión estaba aún presente. Leo estaba intentando rastrear la fuente del ataque cuando una alarma de seguridad comenzó a sonar.

"¡Tenemos una brecha de seguridad!" exclamó Leo. "Parece que alguien ha penetrado en nuestro sistema."

"¿Qué podemos hacer?" preguntó Shahar, mirando a su alrededor, nerviosa.

"Voy a activar un protocolo de emergencia para desconectar las conexiones externas," dijo Leo, su rostro pálido mientras trabajaba rápidamente. "Mientras tanto, necesitamos averiguar quién está detrás de esto."

Shahar salió de la sala de comunicaciones y se dirigió al área de seguridad, donde los guardias estaban en alerta máxima. La intrusión había generado una respuesta inmediata, con guardias patrullando el área y revisando los puntos de acceso.

En medio del caos, Shahar vio a Elias, el informante con el que había trabajado anteriormente, acercándose con una expresión de preocupación. "Shahar, me alegra verte. ¿Qué está pasando?"

"Hay una intrusión en nuestro sistema de comunicaciones. Creemos que están intentando borrar o manipular los datos que hemos recolectado," explicó Shahar rápidamente.

Elias frunció el ceño. "Esto debe ser parte de una operación más grande. He estado investigando más sobre las conexiones entre los funcionarios y las bandas, y hay algo que no cuadra."

"¿Qué sabes?" preguntó Shahar.

"Hay una reunión secreta programada para esta noche en una de las áreas de alto riesgo. Se dice que se están discutiendo grandes decisiones que podrían afectar el control de la ciudad," dijo Elias. "Creo que debemos infiltrarnos en esa reunión y obtener más información."

Shahar asintió. "Vamos a hacerlo. Si podemos obtener pruebas de lo que realmente está sucediendo, podríamos tener algo que usar en nuestra lucha."

La noche cayó sobre la ciudad, y Shahar, Elias, y un par de miembros del equipo de rescate se prepararon para infiltrarse en la reunión secreta. Utilizaron disfraces y equipo de camuflaje para pasar desapercibidos mientras se dirigían al lugar de la reunión.

El edificio al que se dirigían era un antiguo centro de conferencias, ahora en ruinas pero aún funcional. La seguridad en el exterior era intensa, con patrullas y cámaras vigilando cada entrada. Shahar y su equipo lograron evadir las cámaras y entrar por una entrada trasera menos vigilada.

Dentro del edificio, encontraron una sala de conferencias iluminada tenuemente, donde varios altos funcionarios y líderes de bandas estaban reunidos. La conversación era baja, pero Shahar pudo captar fragmentos que hablaban de estrategias para consolidar el poder y controlar la distribución de recursos en la ciudad.

"Parece que están planeando una operación a gran escala," susurró Elias. "Necesitamos grabar esto."

Shahar se movió con cautela, posicionando un dispositivo de grabación en un rincón estratégico. La reunión continuó, revelando detalles cruciales sobre cómo se estaban manipulando los recursos y la información para mantener el control sobre la población.

De repente, uno de los líderes de bandas, con una mirada feroz, se levantó y empezó a discutir un nuevo plan para eliminar cualquier oposición. La tensión en la sala era palpable, y Shahar sabía que estaban en el límite de ser descubiertos.

"Tenemos que salir de aquí," dijo Shahar en voz baja. "Este es el momento justo."

Con el dispositivo grabado y el conocimiento obtenido, Shahar y su equipo se retiraron rápidamente, evadiendo la seguridad y regresando a la base. La información que habían recopilado era vital para exponer la verdad detrás de la red de corrupción y manipulación.

Cuando llegaron a la base, Leo ya había logrado asegurar los datos y restablecer las comunicaciones. "Los datos están seguros ahora. ¿Qué descubriste?"

"Una reunión secreta que revela planes para controlar la ciudad y eliminar la oposición," explicó Shahar. "Tenemos que hacer que esta información llegue a la resistencia y a los medios."

Leo se puso a trabajar inmediatamente para preparar una filtración segura de los datos. La situación era crítica, y el tiempo se estaba agotando. La lucha por la verdad y la justicia estaba en su punto más alto, y Shahar estaba decidida a seguir adelante a pesar de los riesgos.

La ciudad estaba a punto de enfrentar una nueva serie de desafíos, y Shahar sabía que el camino hacia la libertad y la justicia sería arduo. Pero con la información recién obtenida y el apoyo de su equipo, estaba lista para enfrentar lo que viniera.