Capitulo 9

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Cada paso que Louis daba hacia su habitación era una lucha constante contra los obstáculos invisibles que parecían multiplicarse en la penumbra.
Esa misma noche había golpeado al lobo que lo había llevado a casa, y por un breve instante, había temido que ese acto de ira provocara una reacción violenta por parte del lobo.

Ahora, mientras subía escalón tras escalón en la oscuridad, su mente estaba llena de recuerdos y sensaciones intensas. El torso desnudo del lobo, con su pelaje color crema que se extendía desde el pecho hasta la pelvis, era una imagen que se repetía sin cesar en su mente. La fragancia embriagadora de su colonia había invadido sus sentidos de manera tan profunda que había deseado no separarse nunca de él. Pero también estaba el recuerdo de esas enormes manos y garras afiladas, capaces de rasgar la piel con facilidad, un pensamiento que le provocaba un escalofrío de terror y fascinación al mismo tiempo. Se preguntaba qué intenciones verdaderas escondía
aquel lobo.

Finalmente, después de un esfuerzo agotador, Louis llegó a su habitación. Juno yacía en la enorme cama matrimonial, envuelta en un sueño profundo.
La imagen de ella dormida, tranquila y ajena a la tormenta emocional que había vivido, le provocó una pesada sensación de culpa. Habían planeado una noche de películas de terror juntos, y él la había dejado sola sin una explicación, regresando a casa hasta altas horas de la madrugada.
La culpabilidad lo envolvía al pensar en cómo había fallado a la mujer con la que planeaba pasar el resto de su vida. Prometió que, al amanecer, se redimiría con una disculpa y un gesto que pudiera compensar su abandono.
Con movimientos torpes, comenzó a despojarse de las prendas que había usado esa extraña noche, deseando con ansias sumergirse en el abrazo reparador del sueño. Se dirigió al armario en silencio, evitando el riesgo de despertar a Juno. Escogió un sencillo pantalón de pijama, dejando su torso desnudo, y se metió en la cama, rodeando con sus brazos a Juno. Sus sentimientos eran un enigma; necesitaba tiempo para descifrar lo que estaba ocurriendo dentro de él.

11:30 A.M.

El sonido del viento golpeando las ventanas lo despertó con un dolor de cabeza punzante, señal de la borrachera de la noche anterior.
La luz, débil y difusa, era un tormento para sus ojos. Las náuseas lo empujaron rápidamente al baño, donde vomitó repetidamente, sintiendo cada ola de malestar como un castigo por su indiscreción. Con gran esfuerzo, se levantó del suelo frío y se dirigió al lavamanos, sumergiendo su rostro en el agua fría en un intento de despejar su mente y aclarar su visión. Al mirarse en el espejo, se sorprendió al ver una mancha de sangre seca en su brazo. Su corazón se aceleró al tocarla, preocupado por la posibilidad de una herida grave. Al examinar su cuerpo, se dio cuenta de que era solo una mancha de sangre de Legoshi, resultado del golpe que le había dado la noche anterior.
El color carmesí en su piel era un recordatorio de lo sucedido. Louis se preguntaba qué había pasado realmente esa noche. No recordaba nada desde el momento en que entró al bar y empezó a beber. ¿Qué había hecho el lobo para que él reaccionara de esa manera? Decidido a aclarar sus pensamientos, volvió a su habitación y se dio cuenta de que el clima afuera era gris y lluvioso, lo que lo llevó a decidir quedarse en casa con Juno. Sin embargo, notó que ella no estaba en la cama ni en el baño, y se preocupó.
En ese mismo momento una mezcla de alcohol y vómito invadió su olfato, lo que lo llevó a buscar una toalla para secarse у dirigirse nuevamente al baño para darse una ducha refrescante.
Luego, planeaba buscar a Juno y disculparse por su comportamiento.

Más tarde, sentado en el borde de la cama, vestido con un conjunto deportivo, Louis se sentía exhausto a pesar de haber dormido lo suficiente. Estaba abrochando el último cordón de sus zapatillas cuando decidió que era hora de bajar a buscar a Juno.
Salió de la habitación y descendió las escaleras, encontrando la casa en un silencio inquietante.
Juno no estaba en ninguna parte.
Justo cuando empezaba a desesperarse, su teléfono vibró con una notificación. Al revisar el mensaje, encontró dos notificaciones que captaron su atención:

UnderWater  / Legosi & LouisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora