10. La verdad

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— ¿Así que la ahuyentaste? — su postura era relajada, había vacilación en su voz.

Había llegado directo a casa después de ver que el taxi de Ciize se asomó por el final de la calle. Esta vez no fui tras ella hasta asegurarme que llegue a casa, la frustración estaba abrumandome. Jamás había estado en la posición de escoger entre lo que se me ordenaba o el seguir lo que deseaba hacer, lo que yo quería.

— Es lo mejor — hablé convencida de mí acción.

— Estás mal — dijo Gemini negando con la cabeza.

— ¿Mal? — pregunté fastidiada, esperaba su apoyo en mi decisión — no podemos relacionarnos con humanos. Mira lo que somos, Gemini — me dirigí hasta donde él estaba sentado. Él, no me miraba, desvió su atención a algún punto en la sala — somos inmortales y ellos mortales. Somos los depredadores y ellos la presa. Nuestra sola existencia significa una amenaza para ellos y ¿Me dices que está mal? —

— Milk… — la mano de Freen me detuvo para no avanzar más. Me había exaltado al punto de ver de forma amenazante a Gemini.— tranquila por favor. — me pidió casi en súplica. Un enfrentamiento entre él y yo terminaría por dejar hecha polvo la casa.
Gruñí y me alejé de vuelta hacia mí lugar. — No tenías que ser tan ruda con ella. Es cierto lo que dices, pero ella no merecía ser tratada de esa manera. —

— Freen, era lo mejor, ella tiene vagos recuerdos de la noche que fue secuestrada — solté de una la verdad.

Miré a Sirilak, su postura relajada me dejó extrañada, me fijé en los demás y estaban en el mismo estado. ¿Qué les pasaba a todos?

— Se veía venir, pero, no se lo ha contado a nadie más — respondió con seguridad.

— ¿Cómo lo sabes? — con el ceño fruncido caminé hacia estar frente a ella. La curiosidad por saber de qué manera había obtenido esa información me movilizó, aunque, tenía una leve corazonada de quíen se lo había confirmado.

— Sirve de mucho tener amistad con Kornnaphat después de todo — su mirada pasó de estar puesta en la ventana a verme directamente. Ambas nos mirábamos como si quisiéramos demostrar que una era mejor que la otra. — ¿Ya lo ves?

Di una risa nasal. Sirilak era tan buena para poner las cosas prohibidas a su favor. Desearía ser tan lista como ella y no estar en la posición en la que estaba.

— Hablando de ello. Creo que deberían saber que después de tiempo Love y yo hemos detectado algo fuera de lo normal en el instituto —

La intervención de Gemini terminó la batalla de miradas que había iniciado entre Sirilak y yo.

— ¿Y apenas nos lo dices? — al parecer ella se había disgustado con la tardía noticia.

— Queríamos estar seguros — Love defendió ante la imponente postura que había tomado nuestra hermana mayor.

— Te escucho — ordenó para que Gemini prosiguiera.

— Al parecer dentro del equipo de fútbol hay uno como nosotros —

— ¿Vampiro? — Gemini y Love asintieron con la cabeza — ¿De primera línea? — pregunté, los únicos vampiros del bando contrario que trabajaban sin apoyo eran ellos.

— Si —

— Eso significa problemas, pero ¿Por qué está aquí? ¿Qué es lo que busca? y...

Todos, al mismo tiempo, giramos hacia el sonido de pasos que provenían desde el bosque. Eran varios de ellos. Nos miramos para comprobar si todos habíamos escuchado lo mismo. La respuesta fue afirmativa. No nos tomó mucho tiempo para tomar nuestras posiciones de defensa fuera de casa. Gemini y Love a los costados. Freen ubicada en lo más alto y yo, al frente justo detrás de Sirilak.

VÍNCULO [MilkCiize]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora