Capítulo 22

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Después de su cita con Hyunjin, Félix entró a su casa como flotando en una nube, abrazado ese peluche.

Subió las escaleras con calma, pero se detuvo cuando vio la puerta de la habitación de su hermano.

Observó la puerta y luego al peluche entre sus manos, un gran remordimiento recorrió su cuerpo, no era nada justo lo que estaba haciendo con Hyunjin.

No cuando sus hermanos también tenían un tipo de relación.

Suspiro y decidió tocar la puerta, dos toques en la madera y de adentro se escucho un "Adelante"

-¿Yongbok? - preguntó al abrir la puerta.

-O Lix, dime ¿Qué pasa? - su hermano había salido del baño con una tualla alrededor de sus caderas.

-Nada, solo pasaba a verte y saludarte - el peliazul entrecerro los ojos y vio a su hermano.

-¿Qué necesitas? Dinero tienes, amigos no presto, mi moto, si le llenas el tanque te la presto.

-No idiota... Me preocupo por ti y así lo agradeces...

-Pero ni tan siquiera me has dicho nada, no tiendo tu enojo - le dio la espalda para buscar algo de ropa y cambiarse.

Félix suspiro, lo mejor sería ir al punto y rápido.

-Hermano, necesitamos hablar - soltó Félix con una sonrisa pícara

-¿Qué pasa, Félix? - preguntó el peliazul con algo de sorpresa por la cara y el tono de su hermano.

-Sam... ¿Por qué no le has dicho que es tu novio? ¡Es hora de que lo oficialicen! - le grito eso último, dejando su oso de peluche en el escritorio de su hermano.

-Bueno, no sé... no quería presionarlo - respondió mientras se rascaba la nuca algo nervioso.

Félix comenzó a reír a carcajadas -¡Presionarlo! - grito - ¡Por dios Yongbok ya pasaron una noche juntos! ¡Ese chico te quiere y mucho! - Yongbok estaba algo sorprendido - Necesitas hacer algo grandioso para que se dé cuenta de lo que siente.

-Lix, no es tan fácil...

-¡¿No es fácil?! - lo interrumpió - ¡Claro que es fácil! - lo tomo por los hombros - Escucha, hermano. Sam merece algo especial. No puedes simplemente decirle "hey, ¿quieres ser mi novio?" ¡Eso es aburrido! Y el chico no se merece una propuestas tan culera como esa.

-¿Qué propones entonces? - pregunto el peliazul riendo un poco.

Una sonrisa maliciosa se dibujo en el rostro del rubio - Algo grande. Algo que le muestre a Sam que estás dispuesto a hacer cualquier cosa por él.... - lo pensó - ¡Un flashmob en el centro comercial!

-¿Un flashmob?! - respondió atónito.

-¡Sí Bok! - se veía muy entusiasmado por la idea - ¡Con música, baile y una pancarta que diga "Sam, ¿quieres ser mi novio?"! - se separó de su hermano para hacer pantomimas de lo que podría hacer por el pelirrojo.

-Félix, eres un loco... - comenzó a reír el mayor.

-¡Eso es lo que te hace falta, hermano! Un poco de locura. ¡Vamos a hacer que Sam se sienta especial! - su hermano se veía feliz, pero debía admitir, eso no iba con él.

-Esta bien, pero lo haré a mi manera.

-Bien como quieras - rodó los ojos y volvió a tomar su oso de peluche - por cierto este fin habrá una carrera, si quieres puedes invitar a Sam, le diré a su hermano que lo lleve y así podrán verse una tarde.

Dicho eso salió de la habitación de su hermano con menos culpa encima, hasta que esos dos no fueran novios y salieran más, no iba a tener su conciencia tranquila.

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