~Where do broken hearts go?~

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~Liam~

Los cuatros nos despertamos a eso de las diez y media, desayunamos y nos vestimos todo lo rápido que pudimos y pusimos rumbo al Madisson Square Garden.
Allí haríamos ensayos generales, pruebas de sonido y organizar las pasarelas. Ibamos a preparar todo para una noche increíble.
Para nosotros el Madisson es un sueño que cada año pasamos por él. Sin querer, cada vez que entramos hago la vista al pasado y recorro todo el camino que he logrado hacer, con la mente. Y no puedo sorprenderme más.
Trabajamos hasta las dos y salimos fuera del pabellón para ir a comer algo. Cuando volvemos uno de nuestros managaners nos llama para darnos una noticia, nos acercamos a él y a su lado hay dos chicas, una de ellas; nuestra peluquera Lou. Los cuatro saludamos a nuestra amiga que todos los años a estado a nuestro lado apoyándonos cada segundo, a la derecha de Paul, nuestro mánager, hay una chica rubia de ojos verdes saltones y enormes, con un pequeño piercing en la nariz y en la oreja derecha varios también; su pelo echado a la izquierda deja ver la cantidad de pendientes que lleva. Es alta aunque no tanto como Harry o yo mismo, más o menos de la altura de Louis. Lleva una camisa negra suelta asillas y unos pantalones rotos por las rodillas negros, como los que solemos llevar todos nosotros. En cierto sentido, es bastante guapa.
- Bueno chicos...lo que queda de gira vais a ir bien acompañados, como siempre por Lou.-ella sonríe y le devolvemos el gesto. La intriga me puede, ¿quién se supone que es la otra chica?.- tendréis varias nominaciones en próximas galas, y bastantes conciertos que dar, por lo tanto, hemos decidido contratar una estilista.-señala a la rubia.
¿Una estilista?. Sabemos vestirnos solitos. Miro a Harry quién su cara de mosqueo lo dice todo. Resoplo y Paul continúa.
- Os servirá de gran ayuda. No os sacará de vuestro estilo.-dice mirando a Harry.- pero Harry deja de vestirte tanto de negro.-sonríe y Lou, a mi lado, ríe leve.- y Liam...tus cuadros, Niall tambien va por ti.-ambos le miramos mal.-Louis...ya te dirá ella.-ríe y se despide.
- Hola.-sonríe la nueva tímida.
- Bueno chicos yo seguiré con vuestros pelazos asi qué...os dejo con ella.-dice Lou alejándose de nosotros.
Miro a Louis y enseguida le está echando ojitos a la rubia, río leve y le doy un codazo.
- ¿Cómo te llamas rubia?.-dice Harry.
El rubio de la chica es bastante claro y es evidente que no es teñido, pero resalta con sus increíbles ojos verdes.
- Joy.-sonríe con menos timidez.-y...si no me equivoco: Harry, Liam, Louis y Niall, ¿no?.- los cuatro asentimos respondiendo a sus gestos señalando a cada uno de nosotros.
- Bueno y...¿para qué necesitamos una estilista?.-pregunta Niall.
- Según Paul, os vestis con lo mismo siempre...-ríe leve enseñando unos perfectos dientes.
- Cuanto nos quiere ese hombre eh!.-digo sarcástico.
- Ya ves...-murmura Harry, quien no le hace nada de gracia que, después de ser nombrado el hombre vivo con más estilo, venga una estilista.
- Bueno...-se encoge de hombros.- esta noche tengo que empezar a ponerme manos a la obra con vosotros. ¿Así que tal sí nos vamos al hotel y me enseñais vuestro vestuario?
- Vale...-decimos todos a la vez y nos volvemos al parking y coger un coche para volver otra vez al hotel.
Harry, Niall y Louis van en un coche conducido por el rubio, lo cual me quedo yo solo. Al ver que la chica no sabía en cual subir, me ofrecí, por mucho que no quiera una estilista, parece buena gente.
- Joy, ven conmigo.-digo abriendo la puerta del conductor, me dedica una sonrisa y se sube contenta, me siento y arranco abrochandome el cinturon al igual que ella.
- Gracias eh.-sonríe y le devuelvo el gesto.
- No hay de qué mujer.-río leve y salgo del aparcamiento.- ¿de dónde eres?.-me intereso al notar que su acento es estadounidense.
- Nací en Texas, pero vivo en Los Angeles.-responde mirándome.
- Ya decía yo.-ambos reímos.
- ¿Sabes? Me encantan los ingleses. Siempre con su té, su lado izquierdo y su acento.-ríe leve.
- Somos bastante originales.-sonrio conduciendo.
- Los estadounidenses molamos más. Nuestro lado derecho, nuestros rascacielos, nuestras maravillas y nuestras cincuenta y un estrellas.- dice orgullosa.
- Por dios sois muy bastos.-bromeo y se hace la ofendida aguantando una ligera risa.
- ¿Perdona? Somos muy guays. Tenemos un presidente negro.-ríe.
- Nosotros un reloj gigante.-la desafío.
- Chs, eso no es nada con nuestro Lincoln.-sonríe. Es bastante maja, y se pasa un buen rato con ella, sin duda me gustaría conocerla.
- Oh por dios, nosotros tenemos...-me interrumpe.
- No me digas que ibas a decir que teneis a la vieja de la reina.-río y acierta.
- Sí,¿vale?. Molamos aún más.-ambos reímos atravesando el tráfico de Times Square.
- Si tuviera que elegir a alguien del grupo, serías tú.-dice después de un largo silencio mirando por la ventana.
- ¿ Y eso?.-sonrio.
- No sé.-me mira.- eres sencillo, maduro pero divertido, mono, guapo y no eres un creído como Harry.-dice mostrando todos sus dientes con una graciosa sonrisa.
- Harry no es creído, si no que...no le gusta que le digan las cosas...-defiendo a mi amigo-aparte no soy tan guapo eh!.-sonrio.- y lo de sencillo es una cualidad muy básica.
- Que no es creido dice.-ríe.- si eres guapo Liam Payne!.-me da en el hombro bromeando y río.- y no eres ese "sencillo" como todos, eres diferente.-sonríe.
- Soy diferente pero sencillo...vale buen argumento.-río leve.
- Sencillamente diferentemente "belloso" Liam Payne.-definitivamente es el tipo de personas que le importa una mierda lo que digan de ella. Una loca más, pero bastante mona.
- Bueno basta ya de piropos, porque para ti tengo para dar y regalar eh!.-pone las manos sujetando su barbilla sobre la consola del coche y me mira fijamente.
- Dime uno.-propone.
Me dedico un segundo para mirar sus ojos verdes bastante grandes y vuelvo a avanzar en la carretera.
- Mmm...eres bastante guapa.-sonrio admitiendolo.
- Otro.-dice en el misma posición.
- Pues...eres mona y divertida.-digo mirando a la carretera aún.
- Uh dos por uno.-ríe y se vuelve a sentar bien mirando al frente.
Sonrio y aparco en el parking del hotel. Ambos nos bajamos del coche. Niall, Harry y Louis se adelantan a nosotros y suben por el ascensor de la derecha. Aprieto el botón del izquierdo y esperamos a que baje.
Miro a Joy quien no deja de sonreir tontamente mirando al suelo con las mejillas sonrojadas. Me contagia su sonrisa y la miro hasta que me encuentro con sus ojos.
- Tengo otro.-dice refiriéndose a los piropos.
- ¿Cuál? .-pregunto divertido.
- Sexy.- se sonroja aún más y no deja de sonreír.
- Ese lo comparto contigo.-le guiño un ojo y el pitido del ascensor nos avisa que ha llegado, se abren las puertas y entramos en él.
No dejamos de mirarnos mutuamente sonriendo.
¿Qué tiene está chica que no tiene Sophia?...Sea lo que sea, me tiene loco y me encanta.