Capitulo II:El Temple De Las Llamas

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-Cuando un espermatozoide llega al óvulo lo fecunda empezando así los procesos de gestación de un Feto que irá desarrollándose en distintas etapas hasta ser un bebé-

¿Cuál era la parte más horrenda de haber reencarnado como un adolescente? ¿Las hormonas alborotadas y los impulsos sexuales descontrolados? No, eso era normal, lo peor era la vergüenza y la incomodidad que daba volver a recursar biología y todo lo referente a la reproducción de especies.

-Si profesora lo entendemos, Fornicar para hacer bebes-

Uno de los amigos de Jack decidió que era oportuno hacerse el gracioso y aunque los niños de menor inteligencia se rieron los que eran normales lo miraron juzgando su penosa actitud de gilipollas que quiere llamar la atención. Luego de eso termino siendo enviado a la dirección para que la profesora continuará con su clase.

-Asi que estás cosas son órganos fornicadores, los seres humanos son curiosos- Leónidas acotó de forma intrigada, se encontraba sobre mi libro de biología viendo las imágenes y textos que explicaban todo el proceso sexual.

-Oye no digas eso- era sin duda un nuevo nivel de incomodidad, aunque a su vez me inquieto la indiferencia con la que hablaba de nosotros.

-¿Que? ¿Acaso tú no eres un fornicador?- pregunto mientras se volteaba a verme con una seriedad increíblemente fuera de lugar.

-Eh... Bueno yo... En realidad... No y no vuelvas a tocar este tema- mis mejillas ahora debían estar más ruborizadas que un Bakugan Pyrus cuando concluí el asunto, siempre era incómoda esa pregunta y me irritaba tener que responder lo mismo -no es tan importante para los humanos-

Este tema me despertó curiosidad ¿Exactamente como funcionaba el ciclo de vida Bakugan? Sabía que literalmente Preyas dió a luz a sus hermanos y claramente podían sentir amor y atracción entre ellos así que... ¿Ellos tenían alguna noción del sexo?.

-No Fornicador, lo recordaré- su voz era tan indiferente pero burlona a la vez que me hizo llegar al límite de tolerancia.

-Voy a meterte en la lavadora cuando volvamos si no te callas- pase a una amenaza directa para que dejara de una vez el tema ¿Por qué no lo encerré en mi mochila desde el inicio?.

Si la clase de por si ya era terriblemente pesada y agobiante ver cómo Leónidas le prestaba atención de forma no irónica a cada detalle volvió todo espeluznante. Gracias a Dios unas horas después de esa tortura empezó el receso y como era costumbre me apresure a salir del aula.

-Entonces tu tendrás muchos cambios de humor por las hormonas y empezarás a desarrollarte por todas partes, que curiosa es la humanidad ¿Tu cosita también sangra?-

-¡No digas cosita y no!- rápidamente negué todo con mucha vergüenza mientras buscaba alguna ruta de escape donde no esté lleno de estudiantes, odiaba los grandes aglomerados de personas.

-¡Liam, Liam, Liam!-

Escuché una voz llamándome a la distancia, pero la ignore sin más, mi batería social ya se había acabado y necesitaba reponerla.

-¡¡Caxul!!-

El grito fue más fuerte y está vez lo reconocí, se trataba de Jack que agitaba su mano tratando de llamar mi atención mientras se abría paso entre los estudiantes.

-¿Conoces a ese tipo? ¿Es un peleador también? Podemos destruirlo- Leónidas soltó lo último con tanta ganas que más que una pregunta fue una declaración.

-El es... Mi amigo- y con el en la mirada decidí irme en cualquier dirección para que no me encuentre, era demasiado bullicioso y siempre que llegaba empezaba a contar sus anécdotas estúpidos, sin mencionar que deseaba aplicarle la ley de hielo por un rato ya que aún estaba ofendido de que hubiera empezado a juntarse conmigo por una apuesta.

Bakugan:Lost DreamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora