Cancer x Acuario

Capítulo Tres

Segunda oportunidad

«El nuevo vecino era como una luz de neón, escandaloso y dramático; era todo lo que yo intentaba no ser; y no podía apartar la vista de él».

-James

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No llevaba ni cinco minutos en el Aquarius —ni rastro de Venecia por ninguna parte— y Bible ya estaba tratando de que Build renunciara y se fuera.

Igual que la semana pasada cuando lo vio en la cafetería, a Build se le hizo agua la boca al ver al semidiós en pantalones y camisa azul marino con las mangas a la altura de los codos. Pero, a diferencia de la semana pasada, sus mejillas revelaban que no se había afeitado en días y llevaba un silbato negro y naranja colgando de un cordel alrededor del cuello. Cosas que no hacían más que sumar puntos a su atractivo y a ese tirón sexual que... No, no, Build no podía ir por ahí. Era todo un profesional.

Los serenos ojos azules de Bible recorrieron su cuerpo desde sus zapatillas, a su bolsa de viaje, hasta su pelo, y Build trató de ignorar la forma en la que esa mirada hizo que se le erizara la piel y se le acelerara la respiración.

Sí, un profesional como la copa de un pino.

—No es un hotel de cinco estrellas —le advirtió Bible.

—Mi otra opción es dormir debajo de un puente.

Una ola meció el barco y eso hizo que Build se abrazara al chaleco salvavidas del que no se había desprendido desde que pusiera un pie en la embarcación.

Bible arqueó una ceja, como si supiera que el estómago de Build estaba dando volteretas.

Build aflojó su agarre en el chaleco, se recolocó la mochila que llevaba a la espalda y dedicó a Bible su sonrisa más deslumbrante.

Bible desvió la mirada y abrió una puerta.

—Este sería tu camarote.

Build pasó por delante de Bible y atravesó la puerta de lustrosa madera, entrando en un cuarto muy acogedor que olía a abrillantador y a suavizante; una cama individual, alta y con cajones debajo ocupaba la mayor parte de la habitación; anclado con cuerdas a una de las paredes había un panel de madera con bisagras en la parte inferior que casi seguro se transformaba en escritorio; una estantería hacía las veces de cabecero en la parte superior de la cama; y, tal y como Venecia había dicho, un ojo de buey dotaba a la habitación con vista directas al mar.

Build dejó la mochila y el chaleco salvavidas en la cama y vio que Titanic estaba colocado en la estantería. Tomándolo, dijo:

—Me gustan estos toques tan detallistas. Sin embargo, la cama no tiene almohada.

—Cierto —dijo Bible encaminándose hacia el pasillo.

—Espera.

Bible se detuvo.

—¿Sí? —preguntó con la mandíbula apretada y la vista fija en algún punto por encima de Build.

Build se subió a la cama de un salto. El colchón era duro y cómodo.

—¿Eres pariente de Alexander Graham Sumettikul? —le preguntó, quitándose las zapatillas con la única ayuda de sus pies.

Bible parecía perplejo.

—¿Perdona?

—Cal me dijo que eras inventor y dado que te apellidas Sumettikul...

—Así que, si A es igual a B, y B es igual a C, ¿significa eso que A es igual a C?