~Introducción~

41 10 8
                                    

Mi nombre es Eden Rox Elysian, fui nombrada así en honor a los nombres de mis padres, Edgar y Roxan Elysian, o eso me dicen ellos para encubrir que mi padre estaba ebrio al momento de inscribirme y ese nombre le pareció excelente opción en ese momento. Soy la hija de una pareja de actores bastante famosos y queridos en la zona, desde mi nacimiento las expectativas de mis padres se fijaron, obviamente, en que siguiera sus pasos, pero pronto se dieron cuenta del pequeño inconveniente en sus planes, no soy nada buena para la actuación, a pesar de que tomé clases para mejorar y fui a muchos castings, jamás logré destacar ni siquiera en las obras de teatro de la escuela, por ende, mis queridos padres fueron perdiendo poco a poco el interés en su hija sin talento, entonces debido al rigor de su trabajo y a los constantes viajes vieron una oportunidad, bajo la excusa de darme una infancia mejor, a la edad de 10 años fui dejada al cuidado de mis abuelos en el pueblo natal de mi madre. A pesar de no perder el contacto completamente con mis progenitores, no los veo muy a menudo, hacemos llamadas y vienen para fechas importantes o en ocasiones especiales, fuera de eso mi verdadera crianza se la debo a mis abuelos.
En mi hogar actual mi apellido comenzó a distinguirme entre la gente, lo cual me dotó de cierta fama, y con la fama toda clase de compañías. El verano pasado conocí a Valentino, un chico que se me hizo muy guapo desde que se mudó hacía pocos meses, asisto a una escuela privada con la particularidad de que es únicamente para mujeres y justo al lado se encuentra la escuela exclusiva de hombres, en un evento donde ambas escuelas compitieron entre sí, lo conocí. Era el chico perfecto en cada sentido, aún así fui advertida por todos, la familia de Valentino practicaba la brujería y la magia negra y eran vistos con miedo, claramente no me importó, no creía en supersticiones, pero que equivocada estaba. En una visita a su casa para conocer a su familia descubrí que me estaba engañando con otra chica por mensajes, me rompió el corazón y le armé un escándalo. Todo debió quedar ahí, solo una ruptura adolescente, pero no contaba con lo de la magia negra, entonces al día siguiente al despertar, lo supe de inmediato, yo estaba maldita.

Todas las imágenes utilizadas son hechas por inteligencia artificial, una disculpa si algunas salen un poco extrañas

Rostro prestadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora