XI

619 45 7
                                    


POV NARRADOR

Abril estaba sentada en una de las sillas del hospital. Su pierna se movía a toda velocidad a causa del nerviosismo, y en ocasiones podía sentir como la hermana de Samantha la miraba fijamente, no sabía si con odio o lástima. Probablemente todos los conocidos en aquella sala pensarían que ella tenía algo que ver en todo esto.

-¿La familia de Samantha Rivera?

-Sí, nosotros - dijeron sus padres, Veronica se levantó junto a ellos. Abril también.

-Su hija se encuentra bien, se desmayó debido al fuerte golpe pero le hemos hecho pruebas y por ahora esta todo correcto - suspiraron aliviados incluida Abril, que coloco las manos sobre su rostro - salvo una cosa...

Todos quedaron expectantes ante aquel comentario - ¿Qué pasa, Doctor?

-He visto su historial. Es posible que la caída le haya hecho perder recuerdos de su memoria, o recuperar otros que ya tenía anteriormente pero que su cerebro eliminó. El cerebro humano a veces es así.

-¿Samantha volverá a odiar las harleys? - dijo Verónica riendo.

-No bromees ahora, Vero - dijo su madre - ¿Podemos entrar a verla?

-Sí claro. Por aquí.

La familia de Samantha siguió al doctor hasta desaparecer a través de una puerta. Abril mientras se quedó sentada en aquella salita pensando en las palabras del doctor. ¿Y si. Samantha volvia a ser la de antes? ¿Y si la odiaba?

Su pierna seguía moviéndose con rapidez. Ahora que se había enamorado de Samnatha no podía perderla, no soportaría que volviera a odiarla.

Tras media hora de espera la familia de Samnatha salió de la sala. Su madre se sorprendió de verla aún ahí y se acercó a Abrió.

-¿Sigues aquí?

-Quería... saber si esta bien.

Su madre la miró y suspiró. Al ver a Abril agotada en aquella silla, mientras esperó durante horas para saber noticias sobre su hija, aquello le ablandó el corazón.

-Entra y compruébalo tu misma - Abril la miró y sus ojos se encendieron. Verónica también miró a su madre pero no de la misma manera.

-¿De verdad? Yo... Muchas gracias - sonrió y su madre asintió.

-Es la 215

Abril se levantó y fue hasta aquella puerta, atravesó el pasillo hasta llegar a la habitación de Samnatha. La 215. Antes de entrar suspiró profundamente y deseo que todo fuera como hace un hora. Tras unos segundos, abrió la puerta.

-¿Qué haces tú aquí?

Primer golpe en el pecho de Abril.

-¿No... no te acuerdas de mi?

-Pues claro que me acuerdo, por tu culpa estoy aquí.

Segundo golpe.

-No te acuerdas de nada... No me digas eso - Abril puso las manos sobre su rostro.

-¿De qué se supone que me tengo que acordar? ¿De ti riéndote después de mi golpe?

-Las cosas han cambiado Samantha, ahora yo...

-¿Ahora tú que?

Abril miró al suelo y suspiró pesadamente. Samantha la miraba casi con desprecio, con odio, que era exactamente como la miraba antes de que sucediera todo esto. Se acercó hasta la cama donde estaba Samantha y se quedó a centimetros de ella.

Samantha estaba confusa. No entendía por qué Abril estaba ahí, la persona que le había hecho la vida imposible, y tampoco entendía por qué su familia la dejó pasar.

Lost Memories (Rivari)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora