Un invierno, mientras observaban juntos las estrellas en la colina donde se conocieron, Elara habló con una voz que parecía venir de un lugar lejano.
—Cedric, he decidido irme de Althea. Hay cosas que debo hacer, cosas que no puedo ignorar más. Gracias por todo lo que has hecho por mí. Nunca lo olvidaré.
Cedric sintió una punzada de dolor en su corazón, pero sabía que no podía detenerla.
—Te echaré de menos, Elara. Pero sé que tienes que hacer lo que es mejor para ti. Solo prométeme que algún día encontrarás la paz que tanto buscas.
Elara sonrió tristemente.
—Eso espero, Cedric. Eso espero.
Y así, en una fría mañana de invierno, Elara dejó Althea. Cedric la vio partir, sabiendo que había hecho todo lo que podía, pero también entendiendo que a veces, el amor no es suficiente para derretir un corazón congelado.
Con el tiempo, Cedric se convirtió en un líder respetado en Althea, utilizando la sabiduría que había aprendido de Elara para gobernar con justicia y compasión. Nunca volvió a sentir por otra persona lo que había sentido por Elara, pero su recuerdo siempre vivió en su corazón, como un faro que le guiaba en los momentos de oscuridad.
Y aunque nunca volvieron a verse, Cedric siempre creyó que, en algún lugar bajo esas mismas estrellas, Elara había encontrado la paz que tanto anhelaba.
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Amor y respeto
FantasyEn el reino de Eldoria, Cedric, un joven noble y carismático, encuentra su vida transformada al conocer a Elara, una enigmática joven con un pasado doloroso. Atraído por su misterio, Cedric se embarca en un viaje de descubrimiento a través de la mag...