𝑰 𝑵 𝑭 𝑰 𝑬 𝑳 𝑬 𝑺 (PAUSADA)

13

Omnisciente

Su oficina era un desastre, papeles tirados por doquier, tinta, sus camaras y demás se encontraban en el suelo, lo había tirado todo de la furia al ver como sus cuentas bancarias estaban cayendo y su reputación se hundía cada vez más y sabia que todo era obra de esa maldita la cual se las iba a pagar, se estaba hundiendo poco a poco y todo era obra suya, por lo que llevaba bebiendo un buen rato tirado en el suelo.

Con una botella y media de alcohol en su sistema se levantó dispuesto a ir a un lugar donde sabía que podría desquitar su enojo y le daría satisfacción por saber quién era, tomó su arma y salió de su casa.

Llegó al lugar como siempre amenazando a la encargada y dejando unos cuantos billetes en la mesa para luego dirigirse a la habitación encontrandose con la menor de espaldas a el frente al espejo, el alcohol lo hacía pensar aún más en lo sucedido así que se acercó con grandes zancadas hasta llegar dónde se encontraba ésta para tomarla por el cabello, sintiendo el sobresalto de la menor por lo que sonrió con ironía apuntandole con el arma, la chica lo miró asustada como siempre, ya estaba acostumbrada a este tipo de comportamientos por parte de el pero aún así nunca dejaba de asustarla.

-Tu madre... Ella me quitó todo lo que era mío, arruinó todo lo que tenía planeado!- le gritó con fuerza a la chica frente a el que lo miraba sin entender pero sin dejar de temer al tener el arma apuntandole.

-te pareces tanto a ella... Que quiero matarte- sonrío como un loco mientras se agarraba la cabeza con ambas manos, tembloroso.

-pero no lo haré, esperaré y disfrutaré de su sufrimiento- soltó una carcajada mientras arrastraba las palabras, sin soltar el arma tomó a la chica del cabello para tirarla sobre la cama comenzando a arrancar su ropa, ésta pataleaba intentando safarse de el y sentir las manos ajenas sobre su cuerpo, pero quedó totalmente estática al momento en el que james presionó su arma contra su frente.

-Ya sabes cómo son las cosas, niña, así que coopera o te mataré- dejó el arma a un lado del cajón para así tomar el rostro con fuerza de la chica acercando sus labios a los de ella besándola con brusquedad mordiendo sus labios y lamiendolos al sentir la sangre brotar de ellos, aprisionó sus manos por encima de su cabeza sin medir su fuerza.

La chica debajo de el comenzó a temblar sintiendo los toques bruscos en su cuerpo, la lastima a y le dolía, pero no podía hacer más nada que callar y resistir, debía resistir, cómo siempre lo había hecho.

lágrimas cubrían su rostro sin dejar de temblar, sintiendo como sus piernas eran abiertas, por lo que miró hacia otro lado apretando los dientes y contrayendo su rostro al sentir los movimientos bruscos, le dolia tanto, pero no se podia quejar, sabia las consecuencias.

Un pequeño quejido salió de sus labios el cual cayó tapándose la boca con ambas manos sin dejar de temblar y llorar, rezaba porque esto acabara de una vez, sentía su cuerpo siendo arremetido con fuerza contra la cama, lloraba del dolor y de la tristeza de saber que no saldría de ahí por ahora.

James tomó su cabello con fuerza para mirar sus ojos con total odio y burla.

-bastarda-. Susurró en su oído con la respiración agitada, se lo recordaba cada que quería desquitarse con ella y le recordaba lo bastarda e inservible que era, que solo la querían por lástima.

Ella solo cerró sus ojos, tragando el nudo que se había formado en su garganta, soltó un suspiro al sentir al hombre levantarse y liberar su agarre y darle la espalda colocándose su ropa.

-uh, hoy estuvo mejor que siempre-. Le sonrío como si nada, acercandose para acariciar su rostro.

-tienes sus ojos-. Dijosa refiriéndose a los ojos esmeralda de Lena, que, al recordarla apretó el agarre sobre su mandíbula para después soltarla, saliendo de ahí rápidamente.

La chica al sentir la puerta ser cerrada con fuerza se desplomó sobre la cama sintiendo su cuerpo maltratado, sollozos escapaban de sus labios viendo su entrepierna ensangrentada, dolía como nunca, pero debía ser fuerte.

Se levantó con dificultad de la cama yendo hasta el espejo para observar su cuerpo el cual tenía múltiples moretones y cicatrices hechas por el mismo, odiaba tanto su cuerpo, sentía que no valía nada y se preguntaba de su familia, si es que tenía.

Las palabras del contrario la dejaron pensando, su madre... Tenía familia? Su madre? Estaba viva? Tal vez eran alucinaciones por parte de James al estar bajo los efectos del alcohol, aunque era muy poco probable, solo sacudió su cabeza y se limito a meterse en la ducha, enjuagando su cuerpo con fuerza tratando de eliminar el rastro de los toques de James, pasando la esponja por su cuerpo mientras lloraba, se recargo en la pared de la ducha al sentir sus piernas tan débiles y temblorosas.

Lavó su cabello y lo desenredo ya que se le habían formado nudos por los tirones que había dejado James anteriormente, luego de unos minutos de estarse bañando y estar metida en sus pensamientos salió de la ducha, caminando con algo de dificultad hasta su pequeño armario donde tenía unas cuantas prendas, se vistió con cuidado soltando varios quejidos al mover alguna parte del cuerpo.
Era realmente duro, su cuerpo dolía, por lo que optó por quedarse con algo sencillo como su pijama y se acostó en la cama la cual ya habían cambiado las sábanas, no quería tocar esa cama, prefería dormir en el piso pero su cuerpo dolía demasiado así que tuvo que acostarse con cuidado, haciéndose bolita sobre la cama mientras se cubría con las sábanas de pies a cabeza, cerrando los ojos, no quería comer, solo dormír, dormir para soñar que tenia una vida diferente a la de ahora, pudiendo cumplir sus sueños y siendo feliz...

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No quise tocar el tema tan fuerte así que trate de que fuera lo más breve posible.

Disculpen la tardanza pero aquí está el nuevo capítulo como siempre.

Besos <3