Juliette ya echa una señorita tubo a su primera hija, con un Demonio de la alta sociedad, Lucifer y Lilith felices de que su hija halla tenido una bebé.
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a la cual nombró Lilian y su segundo nombre fue Alicia, por la mujer que la cuido desde bebé.Lilian era su mejor creación. Era SU hija, ella era la perfección.
Juliette miraba a su hija Lilian con una mezcla de emociones. Por un lado, estaba orgullosa de la niña fuerte y valiente que estaba creciendo, pero por otro lado, temía por su seguridad en el Infierno. Como demonio, Juliette sabía que el Infierno era un lugar peligroso, lleno de criaturas que se alimentaban de la debilidad.
Pero Lilian era diferente. Tenía una luz en sus ojos que Juliette no había visto en mucho tiempo. Una luz que le recordaba a su propia juventud, antes de que el Infierno la cambiara.
Juliette decidió que debía enseñarle a Lilian todo lo que sabía sobre el Infierno. Cómo sobrevivir, cómo luchar, cómo ser fuerte. Pero a medida que pasaban los días, Juliette se dio cuenta de que Lilian no era como ella. No tenía el mismo deseo de poder, la misma sed de venganza.
*Tiempo después (Lilian ya es un niña)*
—mamá quiero hacer del inferno un lugar mejor... -
Dijo con voz dulce e inocente—Infierno.—
Corrigió su madre mientras leía.—Y yo intente lo mismo, pero el infierno está lleno de gente vil y bastarda.—
Dijo seriamente mientras mirabas su retonioLilian parecía tener un espíritu bondadoso. Quería ayudar a los demás, quería hacer el bien. Y Juliette se encontró en un dilema. Quería proteger a su hija, pero también temía que su bondad la hiciera vulnerable en el Infierno.
Un día, mientras estaban explorando un rincón del Infierno, Lilian se detuvo frente a un grupo de demonios que estaban atacando a un ángel caído. Sin pensarlo, Lilian corrió hacia ellos, gritando
—¡Paren! ¡No le hagan daño! ¿Que creen que hacen?—
Juliette se quedó sorprendida. ¿Por qué su hija estaba arriesgando su vida por un ángel caído? Pero entonces vio la mirada en los ojos de Lilian, una mirada de compasión y bondad.
Y en ese momento, Juliette supo que debía cambiar. No podía seguir siendo la demonio que había sido durante tanto tiempo.
Debía ser una madre para Lilian, debía enseñarle a ser fuerte, pero también a ser bondadosa.tal y como su madre le enseño a ella.
Así que tomó una decisión. Enseñaría a Lilian a ser una fuerza para el bien en el Infierno. A usar su poder para ayudar a los demás, en lugar de para destruir.
—Lilian, tenemos que hablar—
—¿de que? —
Dijo su hija con una sonrisa inocente—saldremos a pasear un rato—
Dijo sonriendo—¡Siiiii! —
Dijo su hija muy feliz de pasar tiempo con su madreJuliette y Lilian emprendieron un viaje juntas, para mejorar un poco el Infierno y hacerlo un lugar mejor para todos. Un lugar donde la bondad y la compasión pudieran florecer, incluso en la oscuridad.
Lilian estaba cumpliendo sus sueños y Juliette estaba haciendo lo mismo, cumpliendo un sueño que tenía desde hace mucho tiempo
Pero no fue fácil. Había muchos que se oponían a su misión, muchos que querían que el Infierno siguiera siendo un lugar de miedo y terror. Pero Juliette y Lilian no se dieron por vencidas.
Pasado un tiempo había más compasión y eso alegro a Lilian, su sueño por fin dicho realidad, estaba súper feliz.